Un 13% de los presos de Sangonera lo son por malos tratos a mujeres

Cada día los medios de comunicación recogen múltiples noticias relacionadas con la violencia de género que pueden ofrecer una pequeña idea de la importancia de esta lacra. Sin embargo, es precisamente en las prisiones donde más claramente se percibe la magnitud de este fenómeno. Un 13,3% de los 859 internos con los que el centro penitenciario de Sangonera la Verde contaba a finales del pasado año, concretamente 115, están acusados de un delito de violencia machista, según datos ofrecidos esta semana por Instituciones Penitenciarias.

La cifra apenas ha variado en los dos últimos años, sin embargo sí ha disminuido el número de internos preventivos que ingresan en la prisión murciana. A finales del pasado año, según los datos que aporta Instituciones Penitenciarias, eran 115 los presos que estaban en prisión por un presunto delito de violencia machista. 82 de ellos ya habían sido condenados por un juez a una pena privativa de libertad y 33 estaban pendientes de juicio.

El año anterior, 2008, las cifras que ofrece Prisiones bailaban por los mismos derroteros. También eran 115 los internos acusados de maltratar presuntamente a sus compañeras o ex compañeras sentimentales. Ese año, sin embargo, eran 74 los ya penados y 41 los internos que se encontraban entre rejas de forma cautelar, hasta la celebración del juicio.

A nivel nacional, el aumento de la cifra de presos por violencia machista resulta bastante más preocupante. A comienzos del pasado año, las prisiones españolas albergaban 2.865 presos por este motivo y a principios de noviembre ya sumaban 4.161, prácticamente el doble. Unas cifras muy alejadas de los 1.900 presos con los que se cerró el 2007.

Muchos condenados

Los procesos judiciales que se inician por violencia de género suelen acabar, en un 90,43% de los casos, con la condena del enjuiciado, según los datos del segundo trimestre del 2009, los últimos de los que dispone el Observatorio Contra la Violencia Doméstica y de Género. Concretamente, el proceso finaliza en una condena en el 83,80% de los casos, si el enjuiciado es español, y en el 95,4%, si es extranjero.

Respecto a la relación entre la víctima y su presunto agresor, la mayoría, un 41,82% mantenían una relación afectiva, es decir, eran novios y un 26,55% habían puesto fin ya a esa relación de noviazgo. Menos frecuente son los procesos judiciales por violencia de género entre matrimonios. Un 20,55% eran marido y mujer y un 11,09% ya estaban divorciados o en trámites de separación.