El Instituto de las Mujeres denuncia a tres agencias de vientres de alquiler por publicitar esta práctica ilegal

La demanda interpuesta se basa en el informe jurídico que remitió el Instituto de las Mujeres a la Abogacía del Estado el pasado mes de enero, donde incluía un análisis realizado desde el Observatorio de la Imagen de las Mujeres (OIM) de las publicaciones en redes sociales y contenidos web de las agencias con sede social en España.

En aquel informe se recogían las 334 quejas recibidas en el Instituto relativas a estos anuncios, junto a un análisis de los mismos realizados por hasta ocho agencias con sede social en España que aparentemente incurrían en esta práctica.

El estudio preliminar ponía de relieve los diferentes recursos comunicativos que algunos de estos negocios, según el citado organismo de Igualdad, utilizan para atraer potenciales clientes. «Desde entrevistas en blogs que disfrazan la violencia que esta práctica supone para la salud de las mujeres, hasta la idealización de las denominadas 'madres gestantes'», concretan los demandantes.

«Estas entidades -prosiguen- recurren a las habituales estrategias de marketing y publicidad para promocionar sus servicios, con un lenguaje claramente mercantil y con argumentos tanto emocionales como de carácter técnico científico dirigidos a generar confianza y empatía».

Antes de emprender la vía judicial, fueron enviados requerimientos a las agencias para que cesaran sus actividad publicitaria, pero no se obtuvo respuesta en ningún sentido. Más tarde, trasladaron a la Dirección General de Consumo por si fuese oportuna la apertura de un expediente sancionador. Finalmente, han sido llevadas ante los tribunales tres empresas.

Desde el organismo de Igualdad quieren recordar que tanto la gestación por vientre de alquiler como la promoción de esta práctica están prohibidas en España. Es más, insisten en que es una forma más de violencia contra las mujeres, que «vulnera sus derechos sexuales y reproductivos».

Esta consideración fue incluida en la última reforma de la ley del aborto, de 2023, donde se fijó esta práctica como una de las «formas de violencia contra las mujeres en el ámbito de la salud sexual y reproductiva». En el artículo 33, además, se prohibió de forma expresa «la promoción comercial de la gestación por sustitución», conocida también como gestación subrogada o vientre de alquiler.

El Instituto de las Mujeres ha demandado ante los tribunales solo a tres empresas por publicidad ilícita en sus 40 años de trayectoria. En todos los casos, fue por presentar a las mujeres de forma vejatoria o discriminatoria. Todas las sentencias resultaron favorables para el organismo y han obligado al cese de las distintas campañas publicitarias por sexistas, degradar la imagen de las mujeres y cosificarlas.