¿Cómo elegir el mejor cargador para tu teléfono móvil?

¿Qué aparato tecnológico lleva encima la mayoría de la población en la actualidad?. La respuesta es sencilla: el teléfono móvil. Este objeto supuso una revolución en todo el mundo, desde él se puede acceder a prácticamente todo. El teléfono móvil necesita de un cargador para que se mantenga en funcionamiento. Existen diferentes tipos de cargadores para el teléfono móvil.

Los cargadores de teléfono móvil son un procesador que decide cuanta intensidad toma de la corriente el dispositivo en cada momento para cargar la batería sin dañar los componentes del terminal. Los fabricantes recomiendan usar el cargador original del teléfono. Actualmente algunos móviles ya se venden sin cargador o puede que necesites otro de repuesto para tenerlo en el trabajo. La OCU recopila una serie de recomendaciones para el buen uso del cargador del teléfono móvil.

1. Carga estándar. Los cargadores USB suelen tener un voltaje de salida de 5V, es decir, un cargador es capaz de suministrar 1,5 A (amperios) a 5V (voltios) y tendrá una potencia de 7,5 W (vatios). Los vatios son el valor más fiable para determinar la velocidad con la que cargará este instrumento.

Si tu teléfono móvil tiene unos años quizá no soporte más vatios, por lo tanto, no te valdrá de nada hacerte con un cargador rápido, de 20 W o más, porque al final el teléfono remodelará esta potencia y usará solo los 5 W admitidos. El precio de este tipo de cargadores ronda entre los 9 y los 15 euros.

2. Carga rápida. La mayoría de los nuevos teléfonos tienen carga rápida, pero no todos los cargadores universales pueden aprovechar todo el potencial del teléfono tanto como lo hace el cargador original del móvil. Para que esto ocurra es necesario compartir protocolos de carga rápida entre el cargador y el teléfono, una información muy difícil de encontrar en la web de los fabricantes. El precio de este tipo de cargadores se sitúa entre los 15 y los 35 euros.

3. Carga inalámbrica. Los de este tipo consisten en la carga electromagnética del teléfono sin necesidad de cables, pero para utilizar este tipo el móvil debe ser compatible con este tipo de carga. La gran ventaja de este tipo de cargadores es la comodidad, aunque tendrás que colocar el móvil en una posición adecuada para que cargue. Algunos cargadores cuentan con luces para mostrar su estado de espera, carga y error. El precio de este tipo de cargadores suele ser más elevado y ronda entre los 20 y 70 euros.

Muchas veces en casa tienes algún cargador de un teléfono antiguo que puede servir para tu móvil nuevo. Es recomendable asegurarse de que el cable no parezca dañado o roto. Si el cable que tienes no se corresponde con el conector del móvil se puede adquirir un adaptador por unos cinco euros, aunque es posible que con él no funcione la carga rápida.

Si utilizas un cargador con varios puertos, su potencia se dividirá entre el número de puertos que estén conectados y afectar a la rapidez con la que cargan. En el caso de los puertos USB del ordenador o del coche suelen proporcionar tan solo 0,5 A, mientras que un cargador rápido tendría hasta 10 veces este valor. Por eso la carga va mucho más despacio.

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