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El Real Murcia Femenino de Tercera Federación vivió una situación surrealista el pasado sábado. Y es que el choque que debía medirle al Granada B ... pertenecienta a la jornada 30 del grupo 5 fijado para las 8 de la tarde, arrancó con una hora y media de retraso, lo que llevó a que el choque se redujera a dos partes de solo treinta minutos con un descanso de cinco debido a que la instalación municipal donde se jugaba debía cerrar a las 23.00 horas.
Al error inicial de los árbitros designados para el encuentro, que según el acta «no se encontraban en las instalaciones deportivas para la hora del comienzo», el vocal de guardia avisó al Comité de Competición informando de la situación, lo que hizo que otros árbitros se encaminaran a dirigir el choque que enfrentaba al conjunto granadino y al murciano.
Eso sí, los nuevos colegiados se dirigieron al Estadio de la Juventud y no a la Ciudad Deportiva de la Diputación de Granada, en Aramilla, donde aguardaban las futbolistas de ambos equipos que llegaron a hacer hasta tres calentamientos consecutivos. Finalmente el choque, en el que ambos equipos no se jugaban nada, acabó con derrota murciana (1-0) y con las futbolistas del Real Murcia llegando a casa a las tres de la mañana.
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