27.831 granas en el «arreón» hacia el ascenso
El Estadio Enrique Roca se acerca al lleno en una jornada histórica para el Real Murcia, cuyos aficionados batieron el récord de asistencia en Primera Federación e hicieron revivir ante el Barça Atlètic las grandes tardes de Primera División
«Hemos intentado aparcar el coche lo más cerca posible de la entrada, porque ¡mira cómo va Pablo! Pero esto está a reventar de gente y al final lo hemos metido en un terraplén, no sé ni cómo», se asombraba y lamentaba a partes iguales Pedro Martínez, joven de 22 años llegado de Totana, camino (literalmente, porque atravesó un solar repleto de vehículos) del Estadio Enrique Roca. Pablo es su amigo Pablo López, de 21 años, quien una hora antes del partido Real Murcia-Barça Atlètic avanzaba a duras penas valiéndose de unas muletas. «Me he roto el menisco jugando el fútbol, pero no podía perderme una tarde así, es un día histórico para los murcianistas», comentaba este estudiante de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte en la Universidad Miguel Hernández de Elche. No se lo quisieron perder tampoco su colega Salvador Rodríguez y «otros veinte amigos con los que vamos al Fondo Norte».
A esa hora, lo que se veía al fondo, pero de los exteriores del campo, era una nube de aficionados granas coreando el himno que compuso Second para el centenario del club, en una jornada para su memoria y para la del fútbol español. Logró vender todas las entradas que permite el aforo, más de 30.000, para un encuentro de la jornada 26 de Primera Federación, la antigua Segunda B. El formidable aspecto de las gradas, más propio de la Primera División que tanto anhelan los pimentoneros de toda la vida, dejaba una apariencia espectacular en los minutos previos al inicio. Y, nada más arrancar la segunda mitad, se confirmó un dato histórico, un récord en la categoría: había 27.831 espectadores.
Ambiente de fiesta en el Enrique Roca para apoyar al Murcia ante el Barça BVer 38 fotos
Esta temporada, la mejor entrada fue contra el Amorebieta, con 11.823 personas, pero todo remitía a las grandes efemérides: los 22.457 espectadores del Murcia-Elche del play off de ascenso en la temporada 2017-2018 y, sobre todo, el lleno ante el Real Madrid en la temporada 2007-2008: 30.959 almas. El dato fue lucido en el marcador en el minuto 63, aunque aguó la fiesta Núñez con el gol del empate para el Barça B. Tocaba sufrir.
Con unos agradables 17 grados de temperatura, andaba el cielo plomizo y hasta amenazaba lluvia. Pero, al filo de las siete de la tarde la hinchada activó las linternas de sus móviles e iluminó la casa grana (en los aledaños se hablaba de la 'Nueva Condomina'). «¡Con el 11, Tooooril!», clamó el speaker del conjunto local, anunciando una alineación con un Pedro León saludado con un voceo ensordecedor: «Con el 14, Pedro Leóoooon».
El nombre del ídolo exmadridista encendió aún más de lo habitual al fondo sur, acostumbrado a levantar los ánimos del público en los días de poco ambiente. No era el caso. Este domingo, 5 de marzo de 2023 (anótenlo), los espectadores no solo formaban un grupo hìpermultitudinario, sino también hipermotivado. «Adelante, vamos Real Murcia, adelante, sigue hasta el final, que esta tarde, cueste lo que cueste…!», animaban desde cada rincón de un estadio donde no faltaron banderas rojiblancas, bufandas, camisetas… El precio no era una excusa, porque salieron tiques por 1 y 2 euros.
La afición grana roza el lleno en el Estadio Enrique RocaVer 54 fotos
Eso arrastró a muchas familias, como la de Teresa Calderón y Javier Botía, que llegaron de Los Garres junto a sus hijos, Leo y Sofía, y a «varios niños, amigos del colegio, y sus padres». En total, 12 personas. Entre ellos estaba Manuel, que a punto de cumplir once años vivió su primera experiencia en el Enrique Roca. «Yo soy muy del Real Madrid y del Real Murcia, así hoy que, contra el Barça B, voy a muerte con el Murcia», decía entusiasmado, ante Bruno y Martina.
Y Pepe Palazón, de 62 años, quien rememoraba «aquellas grandes tardes en la vieja Condomina, que entonces era solo la Condomina», fue también en familia: «Aquí estoy con mis cuñados Ángel y Turpín, en este arreón, como decimos en la huerta. Estoy convencido de que este año vamos a subir y hemos venido a apoyar al equipo. Otros han venido con su hermano, con su primo y hasta con su suegra», bromeaba. Y era verdad, había grupos de suegras y yernos. Lo que no una el fútbol….
La tienda oficial vendió artículos murcianistas como no se recordaba en mucho tiempo, gracias a la notable afluencia que se registró desde antes de la una de la tarde. Hubo promoción de paella más cerveza, hinchables, música con Fenómenos Extraños y Dj Mariano… y una abrumadora bienvenida a los jugadores, con miles de personas esperando la llegada del autobús del conjunto dirigido por Mario Simón. Los futbolistas recorrieron a pie los últimos metros hasta los vestuarios, con el subidón metido en el cuerpo para su choque con un equipo de postín.
Un «escenari de luxe»
Ya por la mañana, desde el Fútbol Club Barcelona elogiaron en Twitter el lugar del encuentro: «Escenari de luxe per al partit d'avuii». Y quedó claro que el lujo no fue solo el continente, sino el contenido del Enrique Roca: un río de gente viviendo el sueño del ascenso a la Segunda División y demostrando, de nuevo, la enorme potencia del fútbol como fenómeno de masas y la onda expansiva del Real Murcia en la Región, con público de distintos municipios.
No quiso perdérselo el alcalde de la capital de la Región, José Antonio Serrano, sonriente en el palco junto al presidente de la entidad murcianista, Agustín Ramos, al concejal de Deportes, Pedro García Rex, y a Antonio Pedreño, asesor de Ramos. En la semana en que Ramos y Felipe Moreno firmaron la pipa de la paz, el empresario y exdueño del CD Leganés no pudo disfrutar de la jornada, por tener programado con anterioridad un viaje de negocios a África. Sí que estuvieron el exlíder regional del PSOE Diego Conesa, el exdiputado Joaquín López y el consejero de Presidencia Marcos Ortuño.
En el minuto 42 llegó el estallido de alegría y de euforia, con el gol de Pedro León que adelantó. El tanto se hizo esperar, pero el cántico no: «Lo, lo, lo, lo, lo, lo, lo… vamos a Segunda, con Pedro León». Y aún quedan la segunda parte. Chanel hacía moverse las caderas: «Yo siempre estoy ready»... como la afición del Murcia cuando se trata de los grandes retos. Cuando palmea y lleva a otro arreón: «¡Murcia, Murcia, Murcia!».
Pasado el minuto 90 (empañado el 'fair play' por los gritos de «Puta, Barça»), Carrasco tuvo una clamorosa ocasión de imponer la victoria para los granas. Pero se nubló, para decepción de la hinchada. Por los altavoces, volvía a sonar Second: «Tu afición es la que canta, como un himno de esperanza...». El público tomó los vomitorios y los más fieles aguardaron para despedir al equipo con aplausos. El animador del club anunció el próximo partido en casa, contra el Sabadell, el próximo domingo. También por la tarde. Y dio las «gracias por esta jornada memorable».