Torrevieja estudia concesionar una de las dos principales plazas de La Mata para construir un nuevo parking subterráneo
El Ayuntamiento también se abre a la idea de repetir la misma operación en la plaza de la Constitución para paliar la falta de plazas de aparcamiento
La Mata ya sufre los mismos problemas de falta de aparcamiento que el mismo centro de Torrevieja y el Ayuntamiento quiere encontrar una solución fácil, rápida y poco costosa. La fórmula ya está inventada y ya se ha practicado, como ejemplo más reciente, en la plaza de Oriente. El equipo de gobierno del PP ha encargado a través de un contrato menor un estudio de viabilidad para establecer un nuevo parking subterráneo en la pedanía torrevejense. Las opciones para su ubicación son dos: el parque de Doña Perfecta Rodríguez y la plaza de Encarnación Puchol. El objetivo del ejecutivo municipal es que este nuevo recurso entre a funcionar a mediados de 2026.
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El contrato menor recién suscrito tiene un valor de unos 17.000 euros e incluye la asistencia técnica para el anteproyecto y el propio estudio de viabilidad. Será ese documento en el que se cuantifique económicamente el proyecto y la ubicación definitiva de dicho parking. El contrato se ha adjudicado a la mercantil 330 Global Consulting SL y la recepción del documento se espera que se produzca este mes de febrero. Una vez el equipo de gobierno tenga ese estudio, valorará entonces cuál es la mejor ubicación.
La intención del ejecutivo local, según ha adelantado Televisión Torrevieja, es que esas obras, tanto las del parque en subterráneo como la remodelación de la plaza donde se ubique el mismo, sean ejecutadas a través de una concesionaria. Una empresa que sería después la encargada de gestionar el espacio por una serie de años suficientes que le permitan recuperar la inversión y, aparte, sacar beneficio de la explotación.
El equipo de gobierno del PP asegura que ha tanteado el mercado y que ya hay varias mercantiles interesadas. El número de plazas de aparcamiento que se conseguirían con esta actuación dependerá de la ubicación definitiva, pero podrían estar entre las 200 y las 300 plazas. Si todo va bien, se podría tener la concesión ya a finales de este verano de 2025 y, a partir de ahí, iniciar las obras por parte de la concesionaria privada.
Promesa de largo recorrido
El caso es que la idea de un parking subterráneo en La Mata no es ni mucho menos nueva. La primera vez que se oyó hablar de la construcción de esos aparcamientos fue en 2007. El entonces alcalde, Pedro Hernández Mateo (PP), fue el primero en hablar de los mismos y de su inclusión dentro del proyecto de remodelación de la plaza Encarnación Puchol. En concreto, el exregidor hablaba de que tendría una capacidad para 150 plazas y que contaría con 3.189 metros cuadrados. La valoración de la inversión prevista en 2007 era de 2,8 millones de euros. Incluso se adjudicó la redacción del proyecto al arquitecto Adolfo Rodríguez.
La plaza Encarnación Puchol fue finalmente remodelada, pero hubo que esperar hasta 2011 para verla con el aspecto que tiene actualmente. Se cambió el proyecto quitando el parking subterráneo. La empresa ejecutora de los trabajos fue INGES.
En 2011 también, otro político, Domingo Soler, candidato entonces a la alcaldía por Alternativa Popular (una escisión del PP), llevaba en su programa electoral la construcción de un aparcamiento subterráneo en La Mata para fomentar su comercio y sus playas. Las obras fueron denunciadas en su recta final por carecer de autorización de Costas, según desvelaron Los Verdes. Finalmente se concluyeron ya bajo el primer mandato del actual alcalde, Eduardo Dolón (2011-2015)
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Ahora, de llevarse a cabo este nuevo parking, sería el tercer gran proyecto que el equipo de gobierno de Dolón impulsa en La Mata, con la salvedad de que esta vez se haría con financiación privada y no municipal. En lo que va de legislatura, el Ayuntamiento ya ha concluido las obras de construcción del nuevo pabellón polideportivo y está a punto de rematar por completo la reparación de la senda peatonal que discurre a orillas del arenal matero.
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Un parking en la Glorieta
Pero el de La Mata no es el único parking que tiene en mente el actual Gobierno municipal. El equipo de gobierno del PP ha vuelto a abrirse a otro proyecto que había quedado temporalmente aparcado. El ejecutivo municipal encargó hace más de un año la redacción de un proyecto para la remodelación de la plaza de la Constitución y ahora también quiere estudiar, al igual que en La Mata, si es viable instalar bajo ella otras tantas plazas de aparcamiento.
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Con ello se pretende potenciar los sectores productivos como el comercio y la hostelería que tienen su sede en el centro de la localidad, que en estos momentos ya estrenan los nuevos indicativos del Centro Comercial Abierto. La fórmula que se emplearía es la misma, la de una concesión a una empresa privada que se encargaría de gestionar el parking a cambio de que lleve a cabo las obras de ejecución y de urbanización de la plaza.
Pavimento deteriorado
El equipo de gobierno del PP quiere matar así dos pájaros de un tiro. Por un lado, paliar la falta de aparcamiento en el centro y, por otro, remodelar la plaza de la Constitución, que ya empieza a mostrar cierto deterioro con un suelo irregular, con baldosas levantadas por las raíces de los árboles, así como desniveles que pueden producir alguna caída accidental. Una serie de problemas que se han venido subsanando con parches puntuales como la reposición y nivelación de algunas baldosas.
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Hasta ahora el ejecutivo del PP ha venido defendiendo que, de tocar la plaza de la Constitución, se haría respetando su aspecto actual al tratarse de la plaza más simbólica de la ciudad y escenario principal de las fiestas patronales. En ese sentido, se apuntaba que se preservarían elementos característicos como los archiconocidos azulejos en negro y amarillo yema de huevo. También el arbolado de gran porte, salvo sustituciones puntuales y justificadas.
La plaza de la Constitución, además, presenta un hándicap adicional. De hurgarse en el subsuelo de la misma, se podría dar posiblemente con los restos del refugio antiaéreo de la Guerra Civil, que se ubicó en la céntrica glorieta torrevejense mientras la ciudad fue objetivo de los bombardeos de la aviación fascista italiana.
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