Una asociación propone adaptar iglús de vidrio como refugios de gatos callejeros en Orihuela
El Ayuntamiento espera mejorar de la mano del colectivo Colonias Felinas la vida de estos animales a falta de cerrar una ordenanza específica
El Ayuntamiento de Orihuela estudia adaptar iglús de vidrio para que sirvan de refugio a las colonias de gatos callejeros del municipio. La idea fue presentada el martes por la asociación Colonias Felinas a la alcaldesa, Carolina Gracia, a la que propusieron seguir este ejemplo puesto en práctica recientemente en Monforte del Cid.
Con las nuevas normas de bienestar animal, los ayuntamientos están obligados a llevar un control de estas poblaciones. Este pasado marzo el Ayuntamiento organizó unas jornadas previas con protectoras del municipio a fin de elaborar una ordenanza que regule estas colonias a través del método de captura, esterilización y regreso a la colonia (CER).
Sin ir más lejos, ya el año pasado la Concejalía de Sanidad esterilizó entre septiembre y noviembre a 85 gatos asilvestrados dentro de una campaña subvencionada por la Diputación con 6.891 euros. «Evitar la reproducción incontrolada de estos animales que por su comportamiento poco social y que pueden llegar a plantear problemas higiénico y sanitarios es algo que debemos atender como administración local», explicó entonces el concejal Luis Quesada.
En enero la asociación Vecinos Felinos urgió al Consistorio a agilizar los trámites para la gestión ante el «descontrol», denunciaron. «Hay gente que alimenta, pero no esteriliza, vecinos que dejan salir a sus gatos libremente sin esterilizarlos y también la esterilización de los felinos sin orden ni concierto», decían. Es por esto que urgían a una mayor organización y coordinación del proyecto CER en Orihuela con una propuesta como la suya «totalmente carente de ánimo de lucro».
En ese sentido, pidieron más protección hacia las gestoras de colonias por parte de la Policía Local️. «Las gestoras recibimos amenazas constantes de vecinos que no entienden nuestra labor, aunque se la expliquemos. La misma policía incluso, en ocasiones, nos insta a dejar de ponerles comida». Ante lo cual proponen organizar cursos de formación y carnets a las alimentadoras, más labor informativa para dar a conocer las colonias felinas y educar a la población y a las fuerzas del orden y la señalización de las propias colonias.
En municipios cercanos como Torrevieja se han propuesto reducir su población de gatos callejeros (que ya supera los 2.550 felinos) a través de la ampliación del actual contrato de servicios veterinarios y así pasar de las actuales 350 esterilizaciones anuales a unas 1.187. También la adquisición y colocación de un total de 28 casetas-refugio.