Ribera le pone puertas al campo
La futura vicepresidenta del Gobierno, con más poder sobre el agua, emplea la misma estrategia que con los coches diésel: induce a quitar regadíos junto al Mar Menor y a plantar en otras zonas
Teresa Ribera sentenció que los coches diésel tienen los días contados y machacó este segmento del mercado del automóvil, pese a que se fabrican coches ... diésel menos contaminantes que los de gasolina. Es la misma estrategia que Ribera -quien tendrá más poder en materia de agua como vicepresidenta del Gobierno- está aplicando ahora en los regadíos del Campo de Cartagena, lanzando un mensaje inequívoco de que no tienen mucho futuro en la zona del Mar Menor, al menos gran parte de ellos. Son tácticas similares. La orden del BOE que vincula el 'trasvase cero' de diciembre con la contaminación difusa que provocan los cultivos en la albufera marca por dónde van los tiros.
El Ministerio está advirtiendo de una forma velada a las empresas agroalimentarias de que se vayan buscando otros lugares. Lo cierto es que el sector ya está alquilando tierras de cultivo en otras zonas (incluida Castilla-La Mancha). Estiman -más bien lamentan- que este año podría desaparecer el 20% de la producción agrícola debido a las restricciones. El Gobierno central no se lo va a poner fácil al sector, al menos en una franja importante de la cuenca vertiente del Mar Menor. Y la prueba está en que puede haber otro 'trasvase cero' en enero, pero circunscrito al Campo de Cartagena, como se baraja estos días.
Es el caso de los coches diésel aplicado a los regadíos del Campo de Cartagena, que están declarados de interés nacional -como el resto del perímetro del Trasvase Tajo-Segura- y por lo tanto daría lugar a indemnizaciones millonarias en el caso de que se prohíban. Para no tener que hacer frente a tales reclamaciones, el Ministerio se inclina por el efecto disuasorio.
La vicepresidenta tendrá carta blanca
Otra pieza clave es el anuncio que hizo ayer el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura de declarar el acuífero del Campo de Cartagena como una masa de agua en mal estado químico, en cumplimiento del plan de 'vertido cero'. Este sostén medioambiental reforzaría la posición del Ministerio de no enviar agua del Tajo a la zona, que es lo que estudia en estos momentos. A nivel político, Hugo Morán informará hoy sobre la hoja de ruta del Trasvase en la sede de Ferraz, a puerta cerrada.
Morán se perfila para seguir en su puesto junto a Teresa Ribera. Como vicepresidenta de Transición Ecológica y Reto Demográfico, cualquiera le tose ahora. Tiene más galones y carta blanca de Pedro Sánchez para decidir sobre la política de agua y el Mar Menor.
Asimismo, parece descartado que haya mezcla de cargos del PSOE y Podemos en los segundos escalones de los ministerios. No habrá un modelo 'botánico', como existe en la Comunidad Valenciana. Esto lleva a que Pedro Saura también tiene posibilidades de continuar como secretario de Estado de Infraestructuras si José Luis Ábalos repite como ministro.
López Miras y Diego Conesa marcan sus territorios
Los gobiernos de López Miras y de Pedro Sánchez están condenados a no entenderse -como es habitual en la 'curtura' política española- por lo que se abre otra etapa en la que PP y PSOE se tomarán el chocolate de espaldas en Murcia y en Madrid. La novedad es la escalada de crispación que arruina de entrada cualquier posibilidad de pacto y consenso sobre los problemas de la Región. En la anterior legislatura se alcanzaron importantes acuerdos en la Asamblea Regional, pero ahora no está el horno para bollos debido a los extremismos ideológicos.
Diego Conesa y Fernando López Miras acaban de marcar sus territorios. Se disputan la iniciativa política. El primero ha sacado a relucir los seis ejes estratégicos para la Región que entregó a Pedro Sánchez, y además se reunió ayer con su partenaire de Unidas Podemos, Javier Sánchez Serna, quien también reclama su cuota de poder. López Miras promete lealtad, pero con líneas rojas. ¿Qué papel jugará Conesa en esta nueva etapa, para ganar protagonismo? Sin duda, la de 'conseguidor' con el Gobierno de Madrid. El poder quedará repartido en el palacio de San Esteban, la sede socialista de la calle Princesa y también la Delegación del Gobierno, si es que finalmente desembarca como gobernador José Vélez, amigo de Pedro Sánchez. Si fuera así, Conesa no le quitará el ojo de encima a Vélez, por si le mueve la silla.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión