¡Qué tendrá Feijóo para no querer picar!
LA ZARABANDA ·
Y eso que, pensando en político, el anzuelo es de lo más apetecibleTe lo echas a la cara y, desde luego, luce una buena figura.
–¿Mejor que la de Pedro?
No empecemos, por favor. ¿Es que ... siempre vamos a esta mojando en el mismo guiso? ¿No dijo quien lo dijera, hace ya siglos, que las comparaciones son odiosas? Lo sean o no (que eso también estaría por ver) no podemos pasarnos la vida encendiendo trifulcas. Es algo muy poco rentable. Produce desgastes que luego se pagan en forma de desgobierno y bla-bla-bla. Si ellos pierden el tiempo en polémicas superficiales (su tiempo es también el nuestro, pues somos nosotros quienes les pagamos), eso nos termina dañando a todos.
Acerca de Feijóo, todo el mundo dice que sería un buen presidente. Pero no ya de su autonomía allá en Galicia, que lo es, sino de España. Lo reconocen también, pero en voz baja, quienes militan y ejercen jefaturas en otros partidos. El gallego no tiene una palabra más alta que otra. Habla suave que me estás matando, pero exhibe un discurso con enjundia. Y un dato más a su favor: en su tierra es un triunfador indiscutible. Tanto que no hay dios que lo saque del hórreo.
Todos nos preguntamos por qué el pez gordo que es Feijóo se niega a picar en el anzuelo de gobernar el país. El amor a su tierra no es incompatible con el amor a España. Es verdad que allá arriba tiene al contribuyente en el bolsillo. Y son más los gozos que las sombras. No hay rivales con los que batallar. Está en su salsa. Y luego que, a la puerta misma de su vivienda, los percebes están muy bien de precio.
–A lo mejor tiene miedo de no ganar.
Lo dudo mucho. Feijóo ya ha navegado por las aguas comiciales y sabe de qué va el tema. Quizás le tire tanto el terruño, las meigas y los grelos, que no habrá modo humano de sacarlo de allí. De aquí a las elecciones queda todavía tiempo. Pero yo tengo la sensación de que va a seguir en sus trece. Y lo siento por Casado, que se alegraría lo indecible si pudiera domiciliar en Moncloa a su prestigioso amigo.
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