Propuestas para reforzar el cuidado de la salud mental de los mayores
La celebración de la XXIV Semana del Cerebro, que se celebra del 11 al 15 de marzo, nos ofrece un marco para la reflexión sobre ... el complejo panorama que presenta nuestra sociedad en el ámbito de la salud mental. Múltiples causas, desde la predisposición genética hasta enfermedades graves o limitantes, pérdidas personales, desempleo, jubilación, menor capacidad económica, cambios hormonales, soledad o discapacidad, por citar algunas, provocan alteraciones psicológicas a un número alarmantemente creciente de personas, lo que requiere que los profesionales ligados a la salud reaccionemos y emprendamos acciones que permitan contener cuanto antes esta tendencia.
Según diversos informes, más de un tercio de los españoles padecen alguna alteración mental; quienes padecen problemas psicológicos son cada día más jóvenes, con uno de cada siete chicos de entre 10 y 19 años afectados, y con el 40 por ciento de ellos con ansiedad o depresión. La Organización Mundial de la Salud (OMS), recoge que un 15 por ciento de los mayores de 60 años tienen alguna alteración mental en el mundo. En 2050 un 30 por ciento de la población mundial tendrá más de 65 años y, de ellos, un 11 por ciento, es decir, 426 millones, serán mayores de 80 años y en riesgo de sufrir enfermedades mentales.
La OMS indica que «las afecciones de salud mental en las personas mayores suelen estar infravaloradas e infratratadas, y la estigmatización que rodea a dichas afecciones puede hacer que las personas sean reacias a buscar ayuda«. Esto complica su detección y provoca un deterioro personal, mientras que está probado que la detección precoz de las causas que dan origen al problema puede ayudar a retrasarlo y favorecer un envejecimiento más saludable.
Distintos colectivos de profesionales de la salud de la Región de Murcia, entendemos que es necesario establecer mecanismos de colaboración que permitan abordar el problema de manera integral, planteando estrategias coordinadas para obtener resultados a corto plazo, y que ayuden a controlar la situación de cara al futuro. El establecimiento de un pacto entre organizaciones y entidades relacionadas con la salud se configura como una herramienta valiosa para promover el trabajo en red y establecer propuestas innovadoras.
La organización para este 15 de marzo del 'I Congreso Nacional de Salud Mental en Personas Mayores, humanización y alianzas como garantía de bienestar', promovido por la Comité de Representantes de Personas con Discapacidad y sus Familias, de la Región de Murcia (CERMI) y Fundación Atalaya, y que servirá de punto de encuentro de los distintos sectores profesionales implicados en el cuidado de la salud mental, constituye un interesante punto de partida para visibilizar la importancia de la atención especializada y coordinada en esta materia.
La propuesta de un pacto por la atención psicogeriátrica que establezca procedimientos de trabajo colaborativo, y que será planteado durante el Congreso que se celebrará en la ciudad de Murcia, constituye un nuevo planteamiento que puede contribuir a mejorar la situación, y un motivo justificado de esperanza de cara al futuro. La colaboración entre CERMI, enfermeros, psicólogos, farmacéuticos y trabajadores sociales en el desarrollo de planes de acción integral permitirán, sin duda, mejorar la detección, prevenir y mejorar la salud mental de las personas mayores.
El pacto debe añadir una nueva herramienta de trabajo que repercuta eficazmente en una mayor calidad de vida de las personas mayores, evitando que sus circunstancias personales deriven en problemas mentales y emocionales, o que, una vez detectados, se agraven. Este acuerdo debe favorecer la coordinación de acciones para detectar y abordar la cuestión así el modo de interactuar con los demás miembros del pacto para lograr un abordaje efectivo. Es esencial concretar un modo de trabajo que confiera a cada especialidad la responsabilidad que le corresponde por su posición en la cadena de salud.
Como distribución farmacéutica, con nuestro trabajo diario reforzamos la labor de las farmacias como centros sanitarios que mantienen una intensa y continuada relación con los pacientes, especialmente con la población mayor, cuya relación en numerosas ocasiones trasciende lo profesional para alcanzar lo personal e incluso lo afectivo. Precisamente ahí encontramos la clave para obtener información sobre circunstancias que afectan a la persona que acude a la farmacia y que pueden desembocar en estados de ánimo que, de continuar, pueden provocar alteraciones mentales. Una labor esencial, la de las boticas, que también incluye, entre otras acciones, el necesario acompañamiento de los pacientes en sus tratamientos para tratar alteraciones psicológicas que requieren constancia y cuyo cese puede provocarles recaídas o alteraciones graves de su salud mental.
Las iniciativas propuestas por CERMI y la Fundación Atalaya, a las que desde Hefame damos nuestro apoyo, permitirán mejorar la atención individual e impulsar medidas que ayuden en el cuidado de los pacientes mayores. La situación requiere que cada uno, desde nuestras responsabilidades, asumamos nuestro compromiso con la salud mental, reconociendo sus primeros signos y poniendo a disposición de quienes estén en riesgo toda la estructura sanitaria pública y privada de que dispone nuestro sistema sanitario.
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