Borrar

Un dictamen a la carta para Fomento

PRIMERA PLANA ·

Sábado, 5 de junio 2021, 08:35

Es una cruel ironía que Pedro Sánchez invoque la «concordia y el diálogo» frente a «la venganza y la revancha» para justificar los indultos del ' ... procés', mientras el Ministerio de Fomento condena al murciano Juan de la Cierva con un juicio sumarísimo del que solo se conoce folio y medio del historiador Ángel Viñas, un dictamen que usa Aviación Civil para impedir que el aeropuerto de Corvera lleve el nombre del inventor del autogiro. Era una petición del Gobierno regional, avalada por la Asamblea en 2017, con los votos en contra de PSOE y Podemos. La Federación de Asociaciones de Memoria Histórica de la Región de Murcia también expresó su oposición, asegurando que se incumpliría la ley porque De la Cierva, dicen, era consciente de su intervención en el golpe contra la República cuando facilitó el alquiler del 'Dragón Rapide', que acercó a Franco a la península. Sería una insensatez discutir de historia con un profesional de la talla de Ángel Viñas, pero son pertinentes varias objeciones. En primer lugar es criticable que la Secretaría de Estado de Memoria Histórica no haya encargado el dictamen a varios expertos o a la Real Academia de Historia, que hubiera sido lo mejor, sino precisamente a un historiador que en su blog escribió en 2019 tres artículos intentando demostrar que De la Cierva formó parte de la conspiración contra la República, con constantes referencias a sus propias obras. Así, pues la Secretaría de Estado encargó un informe sabiendo de antemano cuál sería su veredicto. A eso se le llama dictamen a la carta. El hecho de que Ángel Viñas sea militante del PSOE (en 2013 el partido le rindió un homenaje) no menoscaba su crédito profesional, pero no queda en buen lugar el Gobierno eligiendo para este menester a un profesional que milita en su partido. Está claro que Ábalos, ministro de Fomento y secretario de organización del PSOE, no quería sorpresas. Y es que no todos los historiadores sostienen lo mismo. Al revés. Lo de menos es cómo se llame el aeropuerto. Lo injusto es la condena al inventor sin posibilidad de defensa en un juicio político. ¿Qué hará ahora el Gobierno con los premios nacionales de transferencia tecnológica, que desde hace dos décadas llevan el nombre del ingeniero murciano para distinguir a excelentes investigadores, como Pablo Artal? La memoria de algunos es quebradiza y selectiva.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

laverdad Un dictamen a la carta para Fomento