El derecho a saber y la obligación de preguntar

Quisiera referirme en este artículo a una de las bases fundamentales que hacen posible la transparencia: la implicación activa de la ciudadanía.

Las dos grandes vías de acceso a la información pública que los ciudadanos tienen a su disposición, y que es importante que conozcan, son las siguientes: por una parte el Portal de la Transparencia y por otra el procedimiento de solicitud de información no incorporada al mismo.

El Portal publica la información exigida por el ordenamiento jurídico: información sobre los altos cargos, contratos y convenios, subvenciones, información presupuestaria, patrimonial, entre otros muchos temas. También publica aquElla que reviste especial interés para los ciudadanos, como pueden ser los datos de vacunación en la Región de Murcia, con una actualización constante; o información sobre los acuerdos aprobados en el Consejo de Gobierno. A través del Portal se hace realidad el principio de publicidad activa, es decir, la publicación de información sin necesidad de que los ciudadanos la soliciten.

Por el contrario hablamos de publicidad pasiva cuando nos referimos al derecho de los ciudadanos a pedir información pública a los organismos públicos. En este caso es el ciudadano el que solicita, a través del procedimiento habilitado al efecto, información que no consta en el Portal; requiere proactividad del mismo. Sin la pregunta del administrado, esta parte del derecho de acceso a la información pública queda vacía, mermando sustancialmente los niveles de transparencia de la Administración.

Como valor ético y moral debemos subrayar la responsabilidad de todos en la gestión de lo público, nuestro deber de participación, y para su cumplimento es necesario disponer de la información que nos permita el juicio crítico. En mi opinión, en los asuntos de gestión pública, más que un derecho a la información, estamos ante una obligación de preguntar como consecuencia del deber moral de participación del ciudadano.

Estas dos piezas del sistema son complementarias e inversamente proporcionales. Cuanta más información publiquemos, menor necesidad tendrán los ciudadanos en cursar solicitudes específicas de acceso a la información. El objetivo es que la Administración vaya identificando nuevos conjuntos de datos que interesan o solicitan los ciudadanos y pase a publicarlos sin previo requerimiento.

Si son importantes los contenidos que se publican, también importa la forma de hacerlo. Desde la Consejería de Transparencia, Participación y Administración Pública trabajamos para publicar la información en un formato abierto que permita a cualquier persona, entidad o empresa, utilizarla sin restricciones. También estamos mejorando en materia de accesibilidad y facilidad de uso del Portal. Muchas desigualdades sociales se han fundamentado en un desigual acceso a la información. Es obligación de la Administración garantizar la igualdad en el acceso, lo que redundará en el avance social de los grupos más desfavorecidos.

Otro aspecto importante es la repercusión que la información tiene en los ciudadanos, cómo ha llegado la información y la utilidad, el resultado que se obtiene. Es necesario un 'feedback' que nos ayude a mejorar.

Si tienen tiempo, les pido que entren en el Portal de Transparencia de la Administración regional; basta con teclear transparencia Murcia en cualquier navegador. Déjense guiar por los distintos vínculos y busquen cualquier información que les resulte interesante o curiosa. En el Portal se explica también cómo pueden solicitar otra información pública, y cuenta con un apartado para consultas, quejas y sugerencias que son puntualmente atendidas. 'Sapere aude', como decían los clásicos: atrévanse a saber.