Los regantes denuncian que el plan de desalación de Ribera no cubrirá el recorte del Trasvase

Se basan en los datos del Plan de Cuenca del Segura, ratificados por el Ministerio en el programa que presentó al Consejo Nacional del Agua. Concluyen que el volumen adicional para riego está lejos de los 78 hectómetros que dejarán de recibir del Tajo, mientras que otros 27 afectarán a los abastecimientos, según sus estimaciones.

Asimismo, consideran que estos caudales no son nuevos, sino que ya estaban recogidos en la planificación de la cuenca del Segura para compensar las infradotaciones de los regadíos del Trasvase, y, sobre todo, para suplir progresiva reducción de las extracciones de agua de los acuíferos sobreexplotados. Sobre esta base, no creen que funcione el plan alternativo del Ministerio para cambiar trasvases por desalación en el año 2025, que se considera la primera fecha de referencia para comprobar los resultados del plan de la vicepresidenta Teresa Ribera.

De acuerdo con los datos del Plan del Segura elaborado por la CHS, en el anterior ciclo de planificación, que está a punto de expirar, se calculó una producción máxima de desalación de 224 hectómetros anuales para los regadíos, que incluía 41 de la desaladora de Escombreras (sufragada por la Comunidad Autónoma) y de las plantas privadas de los regantes de Mazarrón y Águilas. La oferta de Acuamed fue de 183 hectómetros, incluyendo las instalaciones del Bajo Almanzora. En el caso de Escombreras, su producción nominal de 20 hectómetros al año no se cumple.

El próximo plan de cuenca prevé, en el horizonte de 2027, una capacidad total de desalación de 404 hectómetros, de los cuales 261 irán para el regadío, una vez que se amplíen las tres grandes desaladoras de Acuamed (Torrevieja pasará de 80 a 120 hm, mientras que Águilas y Valdelentisco prevén alcanzar 70 cada una). El volumen adicional real para la agricultura será de 37 hectómetros, ya que el resto se reserva para los abastecimientos.

El Ministerio prevé que la asignación extra para atender el consumo urbano, industrial y de servicios, se traspase al regadío en tanto que la Mancomunidad de los Canales del Taibilla no necesite esos caudales. Este organismo dispone de sus propias desaladoras para atender la demanda, con una capacidad de producción de 93 hectómetros al año. El resto se completa con el Trasvase y con el río Taibilla.

La denuncia de los regantes estriba en que esos 37 o 38 hectómetros adicionales de la desalación no cubren el recorte previsto de las transferencias del Tajo, puesto que oficialmente les corresponderán 20 de Torrevieja, 5 de Águilas y 13 de Valdelentisco.

Según sus estimaciones globales, eso representa un 12% de las reducciones totales de 316 hectómetros que se plantean en el horizonte del año 2027 en la cuenca del Segura, que incluyen la merma del Trasvase y los menores recursos que se extraerán de los acuíferos.

En la actualidad las tres grandes desaladoras gestionadas por Acuamed tienen una capacidad máxima de producción de 177 hectómetros al año con destino a todos los usos, preferentemente los regadíos. En lo que respecta a la desaladora de Torrevieja, recuerdan que fue proyectada para cubrir la infradotación de los regadíos del Trasvase, de acuerdo con las previsiones de la ley del Plan Hidrológico Nacional del año 2001.

Se da la circunstancia de que la Confederación Hidrográfica del Segura incluye en su Plan de Cuenca unas transferencias del Tajo de 197 hectómetros cúbicos anuales para los regadíos, sin tener en cuenta el recorte previsto de 78.

El Ministerio prevé invertir 343 millones en la ampliación de las desaladoras y la conexión de las redes, junto a otros 389 para construir tres plantas fotovoltaicas.