El programa baraja un precio por el agua depurada, pero la Consejería lo descarta
Lo plantea como una alternativa para financiar las obras y propone que los regantes abonen 5 céntimos por metro cúbico como mínimo
La Dirección General del Agua acometerá cuatro líneas de actuación que suman 156 medidas destinadas a infraestructuras de gestión de pluviales y de conducción y ... depuración de aguas residuales. Conlleva un gasto de 23 millones por año que esperan financiar con fondos públicos en su mayor parte. Dispondrá, asimismo, de excedentes recaudados con el canon de saneamiento.
El documento incluye la posibilidad de que los regantes que utilicen las aguas depuradas asuman una parte de los costes a través de una tarifa que no debe ser inferior a los 5 céntimos por metro cúbico. Con esta medida se prevé recaudar 1,25 millones de euros al año, considerando que 25 millones de metros cúbicos de estas aguas regeneradas se destinan al regadío. Los agricultores pagarían de esta forma los costes de explotación y mantenimiento de los tratamientos terciarios.
Los regantes del Campo de Cartagena rechazan ese posible canon, argumentando que ya asumen un coste importante impulsando, canalizando y regulando estos caudales hasta sus fincas, que pagan de sus bolsillos.
El director general del Agua, José Sandoval, asegura que en ningún caso se aplicará esta tarifa a los agricultores. Explicó que el equipo redactor del programa ha expuesto posibles alternativas de financiación y que esta, en concreto, queda descartada. Señala que en planes anteriores también se recogía esta opción, pero nunca se ha aplicado.
El plan especifica que la mayor parte de las actuaciones, casi un centenar, tienen máxima prioridad. Precisa que muchas medidas necesitan el consenso de todas las administraciones.
Numerosos puntos de vertido de escorrentías y aguas pluviales
Además de las ramblas conocidas, principalmente las de El Albujón y la Maraña, existen numerosos puntos de vertido al Mar Menor, según un inventario realizado con datos de la Demarcación de Costas, de los ayuntamientos y de reconocimientos de campo. Tanto el documento técnico como el director general del Agua señalan que en ningún caso se trata de vertidos de aguas residuales. «La red de saneamiento no puede verter al Mar Menor», recalca José Sandoval. En la mayor parte de los casos, se trata de escorrentías superficiales procedentes de la franja urbana más próxima a la laguna y que han sido canalizadas para salvar paseos marítimos y evitar la acumulación en las zonas adyacentes y la inundación de las viviendas y locales próximos. Otros vertidos corresponden a colectores de pluviales conectados a tanques ambientales que recogen los primeros minutos de lluvias, cuando la carga contaminante es más alta, los cuales no están diseñados para almacenar el volumen total de escorrentía. Hay otros colectores no conectados a ningún tanque que evacuan la escorrentía superficial directamente al Mar Menor.
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