«Estoy vivo gracias a un milagro»

Pudo ocurrir una tragedia y todo quedó en un susto, pero de los grandes. Un profesor jubilado, J.A.G.S., natural de Ricote, pero con residencia en Yecla, sufrió el miércoles de la semana pasada un accidente durante la quema de rastrojos y resultó herido por un artefacto pirotécnico que no llegó a explotar, pero que le produjo quemaduras en el brazo izquierdo, la pierna izquierda y molestias en los dos oídos.

El profesor jubilado, que acude con frecuencia a su pueblo donde vive un hermano, está casado, tiene dos hijas y ejerció la docencia durante cuarenta años en el colegio Alfonso X el Sabio, de Yecla.

«A las nueve de la mañana fui a mi huerto en el paraje de Las Piezas a coger limones y naranjas, y vi un montón de restos de poda en el lugar que utilizo como quemador, y como dispongo de la autorización pertinente expedida por la Dirección General de Agricultura, le pegué fuego. En un momento dado fui a coger una rama y al darme la vuelta se produjo una fuerte deflagración que se oyó en medio pueblo y que me desplazó dos metros», relató ayer este jubilado, que admite que «San Sebastián, mi patrón, hizo un milagro y estoy vivo gracias a él».

Tras varios minutos en el suelo e inconsciente, pudo levantarse y acercarse a la guardería que está junto a su finca. Allí le atendió la encargada, que le lavó las heridas y llamó a la Policía Local, quien lo trasladó a un centro de salud para realizarle una primera cura de urgencia. El parte médico indica que sufrió «lesiones con pérdida de sustancia en brazo y pierna izquierda y herida punzante en el bíceps». La doctora llamó a una ambulancia que lo derivó al hospital La Vega, de Murcia, donde quedó en observación hasta las siete de la tarde.

Al parecer, la causa de la explosión puede radicar en la existencia de pirotecnia que no deflagró en el castillo de fuegos artificiales que se llevó a cabo en las fiestas patronales de Ricote, el pasado mes de enero. La Guardia Civil de Cieza, que investiga el suceso, le pidió que acudiera al cuartel el lunes y, posteriormente, prestó declaración ante el juez del juzgado de ese municipio.

Agentes del Tedax (Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos) de la Guardia Civil ya inspeccionaron la zona y hallaron dos artefactos, uno de ellos todavía sin explotar. Todo el expediente, una vez concluido, pasará a manos del juzgado de Cieza, según fuentes de la investigación.

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