Una mujer mata a su padre y deja herida grave a su madre en Librilla
Los vecinos llamaron al 112 al escuchar los gritos de auxilio durante la madrugada de este jueves
Una mujer de 36 años de edad ha acabado presuntamente con la vida de su padre, de 66 años, en Librilla en la madrugada de este jueves, y ha herido de gravedad a su madre, que fue asistida por los sanitarios y trasladada al hospital Virgen de la Arrixaca, donde permanece ingresada en la UCI. La joven, que padecía una enfermedad mental, ha sido detenida por los agentes de la Guardia Civil que se personaron en la vivienda familiar tras los primeros avisos de los vecinos al Centro de Coordinación de Emergencias 112.
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La agresión mortal al hombre, de nombre Emilio Pagán, se habría producido con un cuchillo en el cuello, mientras que la madre, de 64 años, habría recibido varias lesiones en el cuello, la espalda y el pecho. La intervención de la Benemérita evitó que la esposa del fallecido terminara también muriendo, al presionar uno de los agentes las heridas que presentaba para que no se desangrara. Los gritos de la mujer, María Nicolasa, despertaron a los vecinos de la calle Reverendo Manuel Guzmán en torno a las dos de la mañana, que temieron lo peor al escuchar a la madre pedir auxilio.
Varias ambulancias con personal sanitario de la Gerencia de Urgencias y Emergencias Sanitarias 061 acudieron al lugar de los hechos tras solicitarlo los agentes. Fuentes del instituto armado confirman que la mujer, que se encuentra en estado crítico, tenía heridas muy graves por las que ha sido intervenida quirúrgicamente en el hospital murciano tras ser estabilizada en su casa.
La pareja, que tiene tres hijos, tiene su residencia en Librilla desde hace muchos años. La hija menor, que reside en Murcia, fue alertada del suceso, tras lo cual tuvo que recibir asistencia al conocer el fatal desenlace. El hijo mayor también se había independizado hace tiempo. La arrestada vivía con sus padres en el municipio librillense y no tenía trabajo. La vida de la madre ya no corre peligro al encontrarse estable en la unidad de cuidados intensivos de la Arrixaca.
Hipótesis: un posible brote psicótico
Emara Pagán, la presunta parricida, llegó a decir a los agentes en el momento de su detención que había cometido el crimen porque así se lo dictó una voz que escuchaba. La hija, según fuentes consultadas, habría llegado a estar ingresada por sus problemas de salud mental y estaba en tratamiento, con terapia psicológica incluida. La Guardia Civil no descarta como principal hipótesis del crimen un brote psicótico sufrido por la hija mediana de la familia.
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Tanto Emilio, dedicado a la banca en el pueblo durante su vida profesional, como Nicolasa, maestra también jubilada, son una pareja muy querida en el pueblo. La atención sobre su hija era plena, a la que ayudaban en todo, tal y como han contado a este periódico sus propios vecinos. Un amigo de la infancia de Emara ha señalado que anoche estuvo tomando un refresco con ella en un bar de la localidad y, aunque parecía estar normal, en los últimos momentos del encuentro pareció tener una conversación incoherente.
Otras fuentes consultadas remarcan que la presunta homicida rechazó en los últimos tiempos continuar con el tratamiento que recibía. Los vecinos también han relatado que podría haber llegado a consumir sustancias estupefacientes. La mujer también habría entrado en una depresión tras romperse una relación sentimental que tuvo hace tiempo. Familiares y amigos han mostrado su consternación esta mañana al conocer la noticia de la muerte del padre.
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La parricida es la nieta de Ana, la 'abuela de las vías'
Ana Jiménez, la conocida como 'abuela de las vías' por su lucha para llevar a cabo el soterramiento de las vías ferroviarias a su paso por el barrio murciano de Santiago El Mayor, es la abuela de la presunta parricida. La familia materna de Emara es natural de la capital pero por motivos de trabajo llegaron a residir fuera del municipio durante largos años. María Nicolasa, hija de Ana, se asentó en Librilla con su marido, y ejerció de maestra en localidades cercanas como Alhama de Murcia.
El Ayuntamiento de Librilla ha decretado dos días de luto en el municipio. La alcaldesa Leonor Hernández ha mostrado sus condolencias por los hechos sucedidos esta pasada madrugada.
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