Lucas y Noa, en Cartagena y Murcia, primeros nacimientos de Navidad
Los dos niños llegaron al mundo con distinta prisa; mientras él se demoró solo 14 minutos, el de ella es el parto más tardío del día 25 en más de 30 años en La Arrixaca
El cartagenero Lucas Angosto fue el primer bebé nacido en la Navidad de 2020 en la Región de Murcia. Su madre, Lorena Giménez dio a luz solo catorce minutos después de la medianoche a un bebé con tres kilos y doscientos gramos de peso. Su padre, Sergio, de 31 años, y Lorena, de 28, experimentan ahora las nuevas sensaciones de su primera experiencia con la paternidad en la habitación del hospital Santa Lucía, en Cartagena, sin las visitas habituales debido a las medidas contra la pandemia de la Covid-19.
La velocidad de este primer parto en la ciudad portuaria contrasta con lo sucedido en Murcia, donde el primer parto del día de Navidad en el Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca se hizo de rogar. En toda la noche los paritorios estuvieron vacíos y en una extraña calma. «En 31 años que llevo trabajando en La Arrixaca no ha pasado nunca», reconoce la subdirectora del Maternal del hospital La Arrixaca, Chitina Martínez.
No fue hasta las 10.20 horas de la mañana del día 25 cuando Noa vino al mundo tras un largo parto que dejó a sus padres, Elías Calderón y Laura Sánchez, ambos de 29 años y primerizos, completamente exhaustos.
Laura ingresó en la noche del 24 en el centro y rompió aguas cerca de las cinco de la mañana. «La madre se encuentra bien, cansada porque han sido muchas horas. Fue un parto natural, con un poco de ayuda con las ventosas, pero gracias a Dios todo ha salido perfecto», asegura Elías.
Antes de Noa, el último bebé en nacer en La Arrixaca fue también una niña: Aitana. Juan Guardiola, de 42 años, y Celia Larrosa, de 37, fueron padres a las 23.07 del día 24 en un parto inducido y programado, pero no por ello más rápido. «Desde que empezaron por la mañana con la oxitocina hasta que dio a luz pasaron trece horas de parto», explica Juan.
Aitana pesó 3 kilos y 620 gamos. «Me encuentro bien, ha sido un parto largo, pero ahora estamos las dos muy bien y muy contentos», asegura Celia desde el hospital, donde las videollamadas han sustituido a las visitas.