La planta de biometano de Barranco Hondo es inviable, según el Ayuntamiento de Lorca
El alcalde lo confirma a los vecinos de las pedanías de Río y Parrilla, preocupados por la posible instalación cerca de estas poblaciones
La proliferación de proyectos de plantas de biogás en el municipio, una decena por el momento, sigue preocupando a los vecinos de las zonas afectadas. Si la semana pasada el alcalde, Fulgencio Gil, se reunió con representantes vecinales de las pedanías altas y la Federación Espartaria para confirmarles la negativa del Ayuntamiento de Lorca a las dos plantas solicitadas en Zarcilla de Ramos y Doña Inés por su inviabilidad, este jueves le tocó el turno a los vecinos de Parrilla y Río.
Estaban alarmados por el proyecto de una planta de biometano y biofertilizantes a partir de residuos orgánicos ganaderos en el paraje de Barranco Hondo, a tres kilómetros y medio del casco urbano de Lorca. El Boletín Oficial de la Región de Murcia publicó hace una semana el inicio del trámite de información pública y la solicitud de autorización ambiental integrada para su puesta en marcha por parte de la empresa promotora.
«Hemos disipado las dudas» de los habitantes de la zona por el proyecto planteado por la mercantil BioLorca en los terrenos de una antigua instalación para el tratamiento de purines por cogeneración en Serrata, porque «el suelo es urbanísticamente inadecuado» para esta actividad, dijo el alcalde, que remarcó que su ejecución es «imposible desde el punto de vista legal» y «no cumple tampoco las limitaciones que hemos establecido a nivel general en cuanto a cercanía de núcleos rurales». Añadió que este tipo de instalaciones «son necesarias» para la eliminación de los residuos pero los promotores «deben buscar ubicaciones convenientes en las que no haya protesta ni polémica vecinal».
En la segunda reunión con los habitantes de zonas rurales por este asunto Gil insistió en que la «herramienta clave» del Ayuntamiento es la «potestad» de otorgar la declaración de interés público, que solo se concederá en los casos que respondan a criterios de conveniencia, oportunidad y estén exentas de conflictividad social». Abundó en que «vamos a evaluar cada proyecto con lupa, aplicando el máximo rigor» y solo se concederá licencia si «realmente se adecúa a lo que los lorquinos necesitamos».
Confirmó que el equipo de Gobierno seguirá abordando las propuestas de este tipo de plantas «con unidad y sin discrepancias» con los afectados y abogó por el «diálogo y la información continua».
En el municipio está en funcionamiento una planta de biogás en la pedanía de Torrealvilla y en construcción otra para el tratamiento de biorresiduos de la actividad ganadera para la generación de fertilizante y biometano junto al centro de gestión de Barranco Hondo. En este caso la planta no generará residuos, según la promotora Gesalor, que prevé que la instalación se ponga en marcha este mismo año.