La caída del árbol de la residencia Domingo Sastre de Lorca se debió a una filtración de agua
La Consejería de Política Social inicia las obras de remodelación del jardín que costarán más de 200.000 euros
El derrumbe de un pino de gran porte de la residencia Domingo Sastre de Lorca hacia la calzada de la avenida de Portugal hace una semana se debió a una filtración de agua. Lo dijo este martes la consejera de Política Social, Isabel Franco, que visitó el jardín con motivo del inicio de las obras de remodelación de éste.
Según Franco el desplome «no tuvo que ver con la salud del árbol, sino con las condiciones del agua en su entorno». Esa pérdida de agua «debilitó el sustento de las raíces en la tierra y dio lugar a esa caída, pero no tememos por otros posibles derrumbes a no ser que se den circunstancias similares«. Añadió que su departamento está en contacto con el Ayuntamiento porque el incidente «tiene mucho que ver con las conducciones municipales de agua en la localidad» para prevenir que afecte a otros ejemplares del jardín.
La consejera supervisó este martes el inicio de las obras de remodelación de los jardines de este geriátrico, de 4.000 metros cuadrados de superficie, en los que se creará una zona de estimulación sensorial para los usuarios a través del contacto con la naturaleza. La inversión prevista es de 215.000 euros procedentes de los fondos europeos de recuperación y resiliencia tras la pandemia y el plazo de ejecución de entre tres y cuatro meses.
Las obras de mejora y saneamiento del jardín incluirán la tala de seis ejemplares de gran porte que se encuentran en mal estado y se eliminarán las barreras arquitectónicas, lo que permitirá una mejor accesibilidad a los residentes con movilidad reducida. También se instalarán dos zonas de circuitos biosaludables, alumbrado exterior eficiente y pérgolas bioclimáticas para fomentar las actividades en el exterior.
Éste será el primer paso en la remodelación de la residencia, dijo Franco, ya que está previsto intervenir «en breve» en las plantas tercera y cuarta con una inversión de 5,5 millones de euros. Señaló que el centro «venía demandando desde hace tiempo una intervención importante que permitiera adaptar las habitaciones y mejorar las condiciones para los usuarios y es lo que vamos a hacer, habitaciones más accesibles y alguna otra habitación que permita atenciones específicas». Remarcó que no se va a ampliar la capacidad del centro y dijo que no está prevista la apertura de las plantas que se encuentran actualmente sin uso.
La residencia Domingo Sastre dispone de 100 plazas, de las que 70 corresponden al Instituto Murciano de Acción Social. El Ayuntamiento cuenta con 10 plazas reservadas para el ingreso de los casos de necesidad social acordados por la Junta de Gobierno Local y Mensajeros de la Paz gestiona 20 plazas de servicio de centro de día.
