López Miras y Moreno Bonilla exigen al Ministerio que no toque el Trasvase

En presencia de los regantes y miembros del Círculo por el Agua del Levante, los presidentes de la Región de Murcia y de Andalucía, Fernando López Miras y Juan Manuel Moreno Bonilla, escenificaron este lunes en Almería un acuerdo institucional en defensa del Trasvase Tajo-Segura, en la que solicitan a Pedro Sánchez que no cambie las reglas de explotación del acueducto y evite el incremento de los caudales ecológicos en el Tajo. Advirtieron de que «una gran reducción o cierre del Trasvase produciría importantes restricciones al suministro de agua a la población y el tejido industrial de las provincias de Murcia, Almería, Alicante y Albacete».

Al encuentro no asistió el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, que fue invitado la semana pasada, pero declinó acudir por motivos de agenda. López Miras se mostró convencido de que los tres presidentes «podremos trabajar juntos. Esto no es un frente contra nadie». Horas después, Puig explicó el verdadero motivo de su ausencia, al señalar que no pensaba participar en actos que propicien la confrontación, en referencia a las críticas al Gobierno central y las discrepancias con Castilla-La Mancha que subyacen en la nueva guerra del agua. El Círculo por el Agua está perfilando las protestas que llevará a cabo las próximas semanas.

Tras la firma del acuerdo, López Miras declaró que los cambios que afectarán al Trasvase responden a una «propuesta unilateral basada en criterios políticos y no técnicos». Teme que el Levante reciba cada año un 50% menos de caudales y que aumente la factura del agua. «Quien pretenda cerrar el Trasvase, nos va encontrar unidos y en sintonía».

En el mismo sentido, Moreno Bonilla declaró que «esto no es contra nadie». «No queremos una lucha de un territorio sobre otro. Buscamos un principio de solidaridad que beneficia al conjunto de la sociedad española». A juicio del dirigente andaluz, los cambios que propone el Ministerio son «una decisión unilateral, no dialogada, no acordada». Sin analizar los pros y contras, «sería una decisión terriblemente injusta. Es un cambio impuesto», añadió. «No existe una razón jurídica, medioambiental, de peso que lleve al Gobierno de España a tomar una decisión grave y severa para el Levante español», recalcó. «Reclamamos un trato justo. Vamos a trabajar para revertir esta situación y que el presidente del Gobierno reflexione«. Moreno Bonilla insistió en que «nunca vamos a aceptar un maltrato a la Región de Murcia y a Andalucía».

Ambos presidentes solicitan al Gobierno de la nación que se garanticen las condiciones actuales del Trasvase Tajo-Segura, «evitando la modificación de las reglas de explotación y el anunciado establecimiento de unos caudales ecológicos en el río Tajo superiores a los actualmente en vigor».

Sostienen, asimismo, que se debe abordar cuanto antes la elaboración de un Plan Hidrológico Nacional. También solicitan que se lleven a efecto las inversiones precisas en Castilla-La Mancha en materia de depuración, saneamiento y suministro. Indicaron que gracias a los alimentos que se produjeron con sus aguas, «el Trasvase ha sido un elemento fundamental a la hora de afrontar los momentos más duros de la pandemia, evitando el desabastecimiento de los mercados y los hogares españoles y europeos».

Por la tarde, el Sindicato de Regantes del Trasvase celebró una asamblea general abierta para dar a conocer a la sociedad «el momento histórico» al que se enfrenta el Tajo-Segura, en la que intervinieron técnicos y empresarios.

Teresa Ribera, por otra parte, explicó ayer que el Ministerio prevé reformas e inversiones por valor de 2.091 millones de euros, dentro de Plan de Recuperación de la UE, para reducir la vulnerabilidad de los recursos hídricos y los espacios naturales costeros frente a los efectos del cambio climático, a través de restauraciones e intervenciones sobre infraestructuras orientadas a reducir la sensibilidad ante los riesgos. Con estas actuaciones se pretenden recuperar los acuíferos y los ríos, mejorar la planificación y la gestión del agua, y combatir la contaminación difusa.