El precio de la uva en la vendimia de Jumilla subirá al mermar la producción hasta un 40%

Los viticultores llegaron a estas conclusiones después de analizar los datos que se pusieron sobre la mesa. Para Pedro García, secretario de Agricultura de Coag y presidente de este sindicato en Jumilla, «estos factores dibujan un horizonte claramente esperanzador. Para esta campaña, en la Región se espera una producción de uva inferior a la del año 2018». Añadió que «la bajada podría estar entre un 30% y 40% menos de uva». Además, gracias a las lluvias que se produjeron en abril, «los cultivos se han podido desarrollar de forma correcta, pero estos últimos meses sin precipitaciones han propiciado que bajen los rendimientos». García señaló que «esperamos una muy buena calidad de la uva, dado que las condiciones climáticas, por la sequía, permiten una agradable situación para los viñedos, que hace que la fruta esté muy sana desde el punto de vista sanitario. Pero se cosechan menos kilos de uva».

Por otro lado, el responsable del sector vitivinícola de Coag a nivel estatal, Joaquín Vizcaíno, que también asistió al encuentro, aseguró que «todo apunta a que vamos a volver a un año de producciones medias, en una horquilla entre los 40 y los 42 millones de hectolitros, siempre y cuando las temperaturas nocturnas no sean muy altas y teniendo en cuenta que en la pasada campaña España certificó 50 millones de hectolitros entre vino y mosto».

Según Coag, otro de los factores que también puede afectar al precio final de la uva que entra a las bodegas es la sequía y las olas de calor extraordinarias, que han provocado una reducción de la cosecha por encima del 10% en Argentina, Chile y Australia. Igualmente, en Europa también se esperan reducciones significativas de cosecha respecto a 2018. Y en el caso de Francia las estimaciones apuntan a una caída del 13% respecto a la vendimia del pasado año, mientras que en Italia se prevé, según fuentes del sector, una merma del 10%.

De la misma forma se estima que las existencias finales de la campaña pasada se cierren en unos 36 millones de hectolitros. «Hasta enero de 2020 no habrá vino nuevo. Si se mantiene el ritmo actual de exportaciones y el consumo interno, el mercado está preparado para absorber esos excedentes, básicos para el abastecimiento en el enlace de campañas. Además, desde la Interprofesional del Vino de España y el Ministerio de Agricultura se estudian medidas de autorregulación del sector, que podrán dar más estabilidad. La normalidad debería ser la nota dominante en la vendimia 2019», avanzó Joaquín Vizcaíno, experto en el sector.

Con estos datos analizados, desde Coag aseguran que «parece más que sostenible que la bajada de kilos en la vendimia, unido a la regulación del mercado de excedentes y a los datos que reflejan un aumento en el consumo nacional, puedan ser sinónimo de un aumento en el precio del kilo de uva», apuntan desde la organización.