Josefa Martínez, de 83 años y usuaria de la residencia de mayores de San Pedro del Pinatar, estrena la vacuna de Pfizer contra la Covid en la Región, este domingo. CARM

Josefa recibe la primera de las 335 vacunas con las que arranca «el principio del fin» en la Región

Internos y personal de dos residencias de San Pedro del Pinatar y la pedanía murciana de Churra estrenan la fórmula de Pfizer

Pedro Navarro

San Pedro del Pinatar

Lunes, 28 de diciembre 2020, 07:24

Amaneció el día de ayer gélido en la Región. Lo suficiente como para haber podido conservar el valioso cargamento recibido por la Consejería de Salud sin refrigeración alguna: 67 viales con las primeras 335 dosis de la vacuna de los laboratorios Pfizer-BioNtech contra la Covid-19 que se van a administrar, por el momento, en residencias de mayores y de personas con discapacidad de la Comunidad. No se trataba, en este caso, de los 80 grados bajo cero que exige su conservación a largo plazo, sino de los entre 2 y 8 grados a los que debe encontrarse la fórmula antes de ser inyectada en los cinco días posteriores -como máximo- a su descongelación.

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Este proceso se inició en la noche del sábado en las instalaciones de ID Logistics en Guadalajara. Desde allí salió, pasadas las 5 de la madrugada del domingo, la valiosa valija, escoltada por una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico. Sobre las 10.45 horas, la furgoneta hacía escala en el Centro de Personas con Discapacidad de la pedanía murciana de Churra. Allí se depositarían 40 viales, a razón de cinco dosis por cada uno.

El resto enfilaban entonces la A-30 y la autovía del Mar Menor rumbo a la residencia de mayores de Mensajeros de la Paz en San Pedro del Pinatar. Era ahí donde la Consejería había organizado todo el dispositivo mediático ante el simbolismo del evento. Fue ahí también donde Josefa Martínez, de 83 años, se convirtió en la primera persona vacunada en la Región contra una enfermedad que, hace apenas un año, ni siquiera existía para los seres humanos.

Previo a la llegada de este pequeño gran cargamento se fue preparando el dispositivo de administración. Parte de la cúpula sanitaria regional, junto a la alcaldesa, Visitación Martínez, aguardaba el momento en las instalaciones desde primera hora. A las 9.30 hacía su entrada el equipo del 061 que procedería a la inmunización de internos y trabajadores durante unas tres horas: dos enfermeros, Jesús Izquierdo y Sonia Caravaca; y dos técnicos sanitarios, José García y Pedro Puerta, que transportaban, además, todo el material necesario para este maratón de pinchazos. Los vecinos comenzaban también a asomarse extrañados a los balcones ante el revuelo organizado a las puertas de las instalaciones, tomadas por la prensa.

«¿Cuándo puedo salir a tomarme un asiático?», preguntaba Manuel Madrid, segunda persona en obtener su dosis

Tras la llegada de los consejeros de Salud, Manuel Villegas, y de Política Social, Isabel Franco, así como del presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, ya solo faltaba el principal invitado de la fiesta: el ARN mensajero llamado a informar al SARS-coV-2 de que «este es el principio del fin», según señaló el ministro de Sanidad, Salvador Illa, el pasado sábado y refrendó el jefe del Ejecutivo autonómico ayer.

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Jaime Pérez, portavoz del Comité de Seguimiento Covid y receptor del pequeño gran cargamento de vacunas, comprueba el envío recibido en la residencia de mayores de San Pedro; la enfermera Sonia Caravaca suministra sus respectivas dosis a varios residentes del centro marmenorense, y uno de los viales de Pfizer que fueron administrados ayer. CARM

«Mezclada pero no agitada»

Finalmente, la caja hacía su entrada al recinto. Sobre ella, el logotipo del Gobierno de España, y el nombre y datos de contacto de su receptor: Jaime Pérez, portavoz del Comité de Seguimiento Covid. «Es un día muy emocionante», confesaba Pérez, al tiempo que explicaba que esta residencia de San Pedro había sido la elegida por encontrarse en una de las zonas con mayor incidencia del virus de la Comunidad.

«La dosis se reconstruye mezclando la solución del vial con un suero y volteándola diez veces; mezclada pero no agitada, como diría James Bond del Dry Martini», explicaba muy gráficamente Asensio López, director gerente del SMS. Una vez preparado el cóctel, y con López Miras, Franco y Villegas observando en la lejanía, comenzaba la vacunación entre los residentes dentro de las instalaciones, vetadas, por cuestiones de seguridad, a cualquier otra persona ajena al centro.

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Galería. Vicente Vicéns / AGM

Josefa fue la encargada de abrir la ronda porque le hacía «mucha ilusión», sensación que se tornó en nervios al ver la expectación generada. «Tenían que estar aquí mis hijos», lamentaba la mujer que ha tenido el honor de ser la primera en recibir esta inyección de esperanza. «No te preocupes; si te van a ver seguro», le decía para consolarla una de esas profesionales que la atiende con cariño cada día. Mientras, Inmaculada Martínez, directora de la residencia, no podía contener las lágrimas, tras meses de angustia.

Solo tres residentes del centro del Mar Menor rechazaron la inyección al no firmar el necesario consentimiento informado

El segundo turno fue para Manuel Madrid, de 65 años. «¿Puedo salir ahora a tomarme un asiático?», bromeaba, sabiendo que la administración de la vacuna no supone un salvoconducto de ningún tipo ni exime de seguir cumpliendo todas las medidas de seguridad, como explicaba, además, Agustín García, gerente de Mensajeros de la Paz en la Región.

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Todos aquellos que recibieron su dosis -que deberán repetir en tres semanas- han tenido que firmar previamente un consentimiento informado. Únicamente tres de los 102 residentes con los que cuenta el centro de San Pedro declinaron vacunarse, por voluntad propia o de sus familiares. «El alto porcentaje de aceptación que hemos tenido, incluso mayor que el de la campaña antigripal, es un éxito tremendo», apostilló Carmelo Gómez, coordinador sociosanitario de la asociación.

Iniciada la vacunación junto al Mar Menor, se abrió el fuego inmunizante en la pedanía murciana de Churra, donde 60 residentes y 111 trabajadores del centro recibieron su inyección. La fase 1 de la campaña no acaba, sin embargo, aquí, sino que cogerá fuerza hoy, tras la jornada simbólica de ayer, gracias a la llegada a la sede de Hefame de otras 12.775 dosis. Frente al frío, el calor de la esperanza.

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López Miras: «Dijimos que todo estaría listo y finalmente así ha sido»

«Hoy es un día histórico para la Región; el principio del fin de una pesadilla que lleva ya nueve meses golpeándonos y nos ha traído mucho sufrimiento», señaló el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, tras vivir un momento «que nos ha emocionado a todos»: el del inicio de las vacunaciones contra el SARS-coV-2 en la Región de Murcia. El jefe del Ejecutivo autonómico indicó que se ha decidido comenzar la inmunización «por aquellos ciudadanos más vulnerables, mayores y personas con discapacidad, y por aquellos que los cuidan», añadiendo un «llamamiento a la responsabilidad», para no bajar la guardia y mantener el cumplimiento de todas las medidas higiénico-sanitarias.

«Dijimos que todo estaría listo cuando la vacuna llegara y así ha sido», continuó el presidente, que recordó que en esta primera fase de la campaña se quiere inmunizar a 12.400 personas y que espera que las residencias de mayores y para personas con discapacidad se encuentren totalmente cubiertas en febrero. «Para abril esperamos haber inmunizado a unos 80.000 murcianos», concluyó.

Por su parte, el alcalde de Murcia, José Ballesta, que asistió al inicio de las vacunaciones en Churra, señaló que «hoy es un día para lanzar un mensaje a la población de la importancia de vacunarse, no solo para protegernos a nosotros mismos, sino también a los demás, a los que tenemos más cerca, a los que más queremos».

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