El fiscal sospecha que el dueño del depósito judicial de Murcia alertó a Koldo de la investigación

Siguen conociéndose datos que involucran al empresario murciano Rogelio Pujalte en la trama de presunta corrupción que salpica a Koldo García, quien fuera asesor y mano derecha del exministro socialista y actual diputado José Luis Ábalos. La Fiscalía Anticorrupción sospecha, tal y como recoge en su querella, que Pujalte, dueño del depósito judicial de Murcia, envió un mensaje a García alertándole de que le estaban investigando.

El pasado 3 de febrero, Pujalte advirtió a Koldo de que no utilizara en sus dispositivos la aplicación Telegram. Un consejo al que el exasesor de Ábalos respondió instándole a que no se preocupase. «Lo sé todo», remató. Este es un dato recogido en un oficio policial fechado el 9 de febrero que el Ministerio Público recogió y que el Juzgado Central de Instrucción número 2 de Madrid ha incluido en un auto reciente. «Se puede colegir que Rogelio está avisando a Koldo de que está siendo objeto de investigación», apunta la Fiscalía.

Los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil llegaron hasta Pujalte tirando del hilo de los negocios que llevaba entre manos el presidente del Zamora, Víctor de Aldama, uno de los supuestos cabecillas de la trama que ha sacudido al Gobierno central. Según informaron a LA VERDAD fuentes cercanas al caso, Pujalte, afincado en Murcia, se había asociado con Aldama para tratar de impulsar la construcción de una incineradora de drogas en la Comunidad.

El empresario entró en la ecuación porque recibió 100.000 euros de una sociedad, Deluxe Fortune, controlada por el presidente del Zamora. Los investigadores de la UCO sitúan a Aldama, junto a otro de los investigados, tras la mercantil Soluciones de Gestión, que facturó 53 millones de euros en 2020 por contratos de mascarillas con administraciones públicas. Los fondos transferidos procederían de ahí, de acuerdo a la querella del Ministerio Público.

En esa conversación por mensaje fechada el 3 de febrero entre los dos investigados, Koldo García explica a Pujalte que nunca ha utilizado la citada aplicación. El asesor le dice «que sabe 'que están, cómo están, cuando están', informando que esta situación 'es por culpa del perro'«, en referencia a Víctor de Aldama, quien a finales del año anterior había sido convocado a la Agencia Tributaria porque Hacienda investigaba los movimientos del dinero obtenido con los contratos de mascarillas, por los que él se habría llevado 9,6 millones de euros.

Ante esa aseveración el dueño del depósito judicial de Murcia le dice al principal investigado de la 'trama Delorme': «Yo cuando me dicen de ti pues lo primero que hago es ponerme en contacto». Una afirmación que ha llevado a la Fiscalía a entender que estaba tratando de alertar a Garcia de que los agentes de la UCO estaban buceando en el caso.

Fuentes cercanas a la investigación aseguran, además, que Pujalte mantenía desde hace años una relación de amistad con el asesor de Ábalos, que este miércoles recuperó la libertad tras negarse a declarar ante la Audiencia Nacional. A él y a otras cuatro personas –que también quedaron en libertad tras su paso por la Audiencia Nacional– se les acusa del presunto cobro de comisiones en contratos de adquisición de mascarillas que ascienden a más de 50 millones de euros.

El juez instructor del 'caso Delorme' –que recibe el nombre del médico francés Charles Delorme, que alcanzó el reconocimiento público en el siglo XVII– es Ismael Moreno, que investiga la querella registrada el otoño pasado por Anticorrupción. La causa está bajo secreto.

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