«El Ejecutivo no debe aceptar los vetos de Vox a los Presupuestos»

Su compromiso es permanente y férreo con las personas migrantes, con la exclusión social de la que son potenciales víctimas, con sus derechos humanos y con todas aquellas actuaciones que, a nivel particular, social y gubernamental, mejoren su calidad de vida. Moisés Navarro (Jumilla, 1991) es presidente de la Coordinadora de Organizaciones no gubernamentales para el Desarrollo en la Región, un paraguas que aglutina a otras 25 entidades que trabajan en el ámbito de la cooperación internacional.

Precisamente es su compromiso el que le lleva a aceptar esta entrevista, para dejar constancia de las carencias y retos que presenta la Región en esta área. El primero y de candente actualidad es la polémica surgida a raíz del anuncio de Vox sobre las condiciones que debe cumplir el Ejecutivo para que la ultraderecha dé su apoyo en la aprobación a los próximos Presupuestos. Pide Vox que se elimine, entre otras partidas, la destinada a cooperación internacional. Y ante eso Navarro recuerda que «Murcia es la comunidad que menos invierte en cooperación de toda España. Tan solo destina el 0,08%, que son unos 475.000 euros».

La cifra está muy lejos del 0,7% del PIB que la ONU marcó en 1980. Un porcentaje que los países miembros de la Unión Europea prometieron alcanzar, con incrementos en sus Presupuestos, en 2015. La cifra que la Región destina es «ridícula» según Navarro, que además también recordó que PP, PSOE, Podemos e Izquierda Unida «firmaron en mayo nuestro pacto autonómico, que entre otras cosas pone sobre la mesa un aumento en las partidas destinadas a la cooperación al desarrollo, hasta alcanzar el 0,7%».

La baja cantidad económica destinada y el pacto suscrito por los partidos serían dos de las razones por las que «la Comunidad no debe aceptar los vetos de Vox a los Presupuestos», añade Navarro, pero no son las únicas. Según cuenta, «a nivel político, desgraciadamente en esta Región se ha ido muy en contra del sentir de la sociedad murciana, que siempre ha sido muy solidaria y ha contribuido a hacer frente a desastres que han sufrido otros países. La poca cooperación que hemos visto en los últimos años la ha hecho la sociedad y el Gobierno regional ha ido al revés de los ciudadanos en este sentido».

Navarro asegura que entre las entidades que trabajan en la cooperación al desarrollo hay preocupación porque «el auge de Vox está condicionando las políticas sociales públicas. Estamos viendo cómo la ultraderecha recorta las partidas más sensibles con un discurso demagogo y populista, que enfrenta a los ciudadanos, que no construye, que defiende primero a los de aquí y luego a los de fuera, y eso es ir contra los derechos humanos». Por esa razón, insiste en recordar a los partidos que «si aceptan las condiciones de Vox, nos veríamos en un retroceso y en un incumplimiento del pacto que firmaron con nosotros».

Además de ser una cuestión de derechos, la cooperación internacional también es uno de los objetivos básicos de desarrollo sostenible (ODS) de la ONU, «y el Gobierno regional no puede alardear de estar trabajando por esos objetivos que se ha comprometido a alcanzar en 2030 cuando no cumple con lo que firma en cooperación», remarca.

Preguntado por los retos que presenta la Región en este ámbito, Navarro destaca precisamente esos objetivos ODS, «que inciden en tres pilares básicos: la lucha contra la desigualdad, contra la pobreza y contra el cambio climático, pero no solo en la Región, sino también en otros países. Cumplirlos es también combatir los discursos discriminatorios que atentan contra los colectivos inmigrantes, o contra el colectivo LGTBI. Hay que hacer frente a esos desafíos, que no se discrimine ni estigmatice a nadie por su origen o condición sexual».

Además, también entre esos retos regionales figura una mejora en la atención «a la crisis de refugiados sin vulnerar los derechos de las personas migrantes, tenemos que atenderlas con dignidad mediante unas buenas políticas sociales». Y es en ese momento de la conversación cuando también saca a relucir la polémica generada por Vox alrededor de los menas: «Son menores inmigrantes no acompañados, no tienen a nadie. Una persona no se marcha a otro país por gusto, y ellos menos. Tenemos que ser conscientes de que detrás de cada inmigrante hay una trágica historia de vida, en muchas ocasiones los han expulsado de sus países, se ven obligados a irse. Y eso ya es demasiado trágico como para que estén atacados y estigmatizados. Ese es el mensaje que tenemos que lanzar. Desde la Coordinadora estamos para ayudar a las personas migrantes, pero también para desmontar con datos e historias reales los bulos que otros lanzan, los prejuicios, explicar por qué vienen, sensibilizar y hacer pedagogía, porque los derechos humanos son de todos».

La Coordinadora de ONG para el Desarrollo es una entidad estatal. Su delegación en la Región, según cuenta Navarro, realiza proyectos para dar impulso a las 25 entidades que la conforman. Entre sus quehaceres, la Coordinadora da asesoramiento a las ONG, representa sus intereses ante las administraciones públicas y sociedad civil, incide en la política para que se lleven a cabo medidas de cooperación «coherentes, eficaces y de calidad», da formación a las entidades y procura fomentar el trabajo en red «para que las ONG colaboren entre ellas, ya que cada una tiene su especialidad propia».