El Congreso aprueba sin ningún voto en contra la supresión de aforamientos
La reforma del Estatuto, en la que Vox se abstuvo, pasa ahora al Senado, que tiene dos meses por delante para vetarla o incorporar enmiendas
Sin ningún voto en contra salió adelante en el Pleno del Congreso la reforma del Estatuto de Autonomía de la Región que elimina los aforamientos a los diputados de la Asamblea y miembros del Consejo de Gobierno.
El texto se remite la próxima semana al Senado, que tiene un plazo de dos meses para vetarlo o incorporar enmiendas. Si se supera este nuevo trámite, regresará a la Cámara Baja para recibir el visto bueno definitivo, antes de su entrada en vigor. Tras esto, el presidente de la Comunidad Autónoma, los consejeros del Ejecutivo y los diputados del Parlamento autónomo podrán ser encausados por la Justicia ordinaria si comenten algún delito.
La modificación estatutaria obtuvo 269 votos a favor y 73 abstenciones. Recibió el apoyo de PSOE, PP, Unidas Podemos , Ciudadanos y Grupo Plural. Vox se abstuvo, al igual que otros grupos nacionalistas, que suelen desentenderse de aquellas cuestiones que no afectan directamente a sus respectivos territorios.
El Pleno contó con la intervención de los diputados por Murcia Marisol Sánchez Jódar (PSOE), Isabel Borrego (PP), Javier Sánchez Serna (UP) y Joaquín Robles (Vox). Por parte de Ciudadanos, que no cuenta con ningún representante de la Región, intervino Miguel Gutiérrez, mientras que Inés Sabanés tomó la palabra en nombre del partido Más País.
Durante el debate salieron a relucir los casos de corrupción de los últimos años en la Región, en especial los que afectaron al expresidente Pedro Antonio Sánchez. El diputado de Unidas Podemos señaló que con la supresión de los aforamientos «comenzamos a cerrar una página negra en la historia de la Región de Murcia, que acabará cuando Pedro Antonio Sánchez se siente en el banquillo de los acusados» por el caso Auditorio, algo que fechó «para principios de 2021». La parlamentaria popular Isabel Borrego respondió que, si no fuera por los aforamientos, dirigentes de Podemos como Pablo Iglesias estarían ya en los tribunales.
Vox también arremetió contra el PP y definió la reforma del Estatuto como «un trampantojo» con el que los populares intentan «solapar su corrupción» ante la perspectiva de un retroceso electoral en la Región a favor de su partido. Vox varió su posición sobre los aforamientos, pues había respaldado su toma en consideración. Según Robles, este cambio de postura se debe a que, con el Gobierno de Sánchez e Iglesias, «todo disenso con los dogmas progres corre el riesgo de considerarse delito de odio».
Ciudadanos, por su parte, reivindicó la paternidad de la supresión de aforamientos. Fue la condición que puso al PP para facilitar con su abstención la investidura de Fernando López Miras como presidente de la Comunidad tras la renuncia de Pedro Antonio Sánchez en abril de 2017.
