La lluvia asesta un duro golpe a los comercios de Murcia en unas rebajas «catastróficas»
Los establecimientos del centro de la ciudad, «muy preocupados» por la baja demanda, que el temporal ha terminado de hundir
«Calles mojadas, cajones vacíos». Esa era la frase más repetida ayer en las tiendas del centro de Murcia. Un viejo refrán, explicaban, que estos ... días están sufriendo en carne propia. El aspecto de las principales zonas de tiendas de la ciudad está estos días muy lejos de ser el que los comerciantes esperaban encontrar en rebajas. Las lluvias de 'Gloria' han supuesto un frenazo al comienzo de una campaña que tampoco había arrancado bien, según reconocieron las asociaciones de comerciantes y los responsables de varios establecimientos de la zona más cotizada de la ciudad. «Es un año catastrófico», aseguró Javi Hernández, dueño de la tienda de ropa Hughon, en la calle Jabonerías. «¿Las rebajas? Mal no, peor. El temporal, internet... Se nos está juntando todo. La bajada se ha notado mucho. La situación da miedo». En la boutique Tros también señalaban al cielo: «Parece que llueven dos gotas y nos asustamos y no salimos a la calle».
Carmen Piñero, presidenta de la Asociación de Comerciantes El Triángulo de Murcia, explicó que «el problema que hay cuando hace tan mal tiempo es que la gente no sale a comprar salvo lo imprescindible, por lo que las ventas han disminuido mucho». Piñero se mostró preocupada por el balance de estos primeros días de descuentos: «El negocio va muy despacio, hay algunos comercios que dicen que va igual, otros que dicen que va peor, pero a nadie le está yendo mejor. Los centros comerciales sí que se llenan, pero nosotros estamos sufriendo».
Desde la Asociación de Comerciantes Carmelitanos, que agrupa a negocios del barrio del Carmen, su presidente, Juan Antonio García, tampoco se mostraba optimista: «Hasta que llegó el temporal, las rebajas se esperaban con la expectativa de remontar ventas, ya que estas Navidades no fueron como se pronosticaba, en primer lugar por la competencia tan voraz de internet, con promociones como el 'Black Friday', y después por las campañas tan fuertes que hacen para las ventas navideñas, con descuentos promocionales muy altos. Así que cuando llegan las rebajas la gente ya no se moviliza». Este comerciante aseguró que ahora solo esperan que los cielos se despejen y empiecen a llegar clientes: «Lo estamos deseando. A ver si no genera más daños y podemos tratar de remontar».
Un nuevo escenario
Yolanda Cantero, de la tienda Furieza, reconoció que estas «no son las rebajas de otros años. La gente ya no sale el día 7 a comprar de todo como hace tiempo. Ese 'boom' de rebajas ya no existe. Lo comentamos entre los compañeros, ya no es lo de antes. Y lo achacamos a las compras por internet y a que están cambiando los hábitos de la gente, que parece que ahora sale si le hace falta algo, mira, compara y compra, y ya no espera tanto a rebajas».
Una trabajadora de un histórico comercio de la zona, que prefirió no ser identificada, subrayó que parte de la situación se debe al adelanto de los descuentos. «Llevamos como tres o cuatro años en que adelantamos las rebajas y empezamos antes de Navidad. Nosotros en concreto hemos tenido una campaña en fiestas muy buena, porque ha hecho frío y tenemos abrigos pero ahora, claro, al adelantar los descuentos, lo que tienes cuando pasa la Navidad es que ya no viene nadie. Ahora está todo muy flojo».
En Maddleton, un comercio de la calle Platería, Rocío Egea esperaba con la tienda vacía: «La lluvia nos ha hecho mucho daño, pero la cosa va muy mal de antes. De hecho nosotros vamos a cerrar el día 15, así que imagínate».
«Las grandes cadenas hacen descuentos todo el año»
Paco Meseguer es uno de los nombres propios del pequeño comercio de la ciudad. Su tienda M53 lleva más de 20 años abierta en la calle Jabonerías, donde ayer esperaba la llegada de clientes junto a sus dos empleados. «La verdad es que este año está siendo especialmente complicado. Antes de Reyes fue bastante bueno, pero en cuanto pasó Reyes se paró todo por completo», afirmó.
Para Meseguer, uno de los principales problemas es la desestacionalización de las ofertas: «Hay grandes tiendas, cadenas y centros comerciales que están haciendo descuentos todo el año, y eso desincentiva a la gente a moverse en rebajas. Pero esto no está pasando solo en Murcia. Nosotros nunca hemos salido de la crisis. Hablo con gente de Valencia o de Madrid y están exactamente igual». Ni siquiera el frío ha ayudado este año: «Estamos todos los comerciantes deseando que entre el frío para vender los abrigos, la prenda que suma, y llega el frío, y aquí no se mueve nada», aseguró antes de nombrar al otro gran enemigo: internet. «Ha influido mucho. El otro día le pregunté a una chica que estaba comprando con el móvil y me decía: 'Me lo llevan a casa y no me cuesta nada'. Así es difícil».
El propietario de M53 espera que las ventas remonten en las próximas semanas para afrontar «muchos gastos fijos: tengo que pagar a mis trabajadores, el alquiler...». Meseguer recordó que tuvo que cerrar otro local «porque no podía pagar 2.500 euros al mes. Hablé con el dueño y me dijo que en lo que estaba pensando ¡era en subírmelo! Cerré y le di la llave».
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