Cultura protege varios molinos y acequias de Barriomar y Era Alta
Huermur pidió la catalogación de estos inmuebles y cauces por «sus valores históricos, etnológicos, industriales y arqueológicos»
Se encuentran en la huerta entre Barriomar y las pedanías de Era Alta y Rincón de Seca, junto al Río Segura al oeste de la ciudad de Murcia. Componen el conjunto molinar del Camino Hondo y varias acequias y todo ello ha sido declarado 'Bien Catalogado por su relevancia cultural' por parte de la Dirección General de Bienes Culturales a petición de la Asociación para la Conservación de la Huerta y el Patrimonio de Murcia (Huermur).
La resolución administrativa cita explícitamente el complejo formado por el molino de pimentón llamado Comino, restos del molino Cascales, cola de la acequia del Batán, parte de la acequia de Almohajar, restos de construcción en el Riacho de la Morda (Reguerón), pantanos de los molinos Cascales y El Riacho de la Morda. Todos estos espacios, defiende Huermur, «con altos valores históricos, etnológicos, industriales técnicos y arqueológicos».
La Dirección General apunta en su dictamen que «toda intervención que pretenda realizarse en el Bien deberá ser autorizada previamente» por este departamento y que sus titulares (propietarios) «deberán conservar, custodiar y proteger los bienes, asegurando su integridad y evitando su destrucción o deterioro».
Huermur solicitó en 2020 a la Consejería de Cultura la protección de este conjunto, del que la asociación destaca un molino de seis piedras, los restos de otro histórico molino, los pantanos de ambos, «y una extensión de más de dos kilómetros de acequias y cauces de la milenaria red de regadío tradicional, con su paisaje y vegetación asociada».
Argumenta también que «en un espacio relativamente pequeño» se encuentran desde el siglo XVIII dos molinos originariamente harineros, que ya entrado el siglo XIX dedicados a la trituración de pimentón y especias.
Cada uno de ellos estuvo alimentado por una fuente de agua diferente: el molino llamado Comino se movía por las aguas del antiguo Riacho de la Morda; mientras que el molino Cascales, antiguo de Riquelme, se alimentaba de las aguas sobrantes de las acequias del Batán (Alcatel) y de Almohajar.
«Posiblemente ambos molinos fueron electrificados a comienzos del siglo XX; el conocido como Comino, es el molino pimentonero de mayores dimensiones que se encuentra en la huerta de Murcia», añade este conjunto, accionado por aguas 'muertas' (las sobrantes después de haber regado bancales y cosechas), sería el primero en obtener «una debida protección» bajo la normativa de patrimonio cultural.
«Ahora lo que toca es instar a que sea recuperado y puesto en valor debidamente como seña de identidad de los murcianos y como muestra del legado cultural que todavía atesora nuestro territorio», apuntó el presidente de Huermur, Sergio Pacheco.
A pesar de la degradación del medio natural donde se ubica, «debido al abandono y el escaso mantenimiento de la limpieza», según Pacheco, tanto el encuentro de la acequia Almohajar con la acequia del Batán como el Riacho de la Morda, «gozan de gran interés paisajístico y son dignas de recuperar».