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El carnaval salda al fin su deuda festiva con Beniaján en un colorido y caluroso gran desfile
Tras las cancelaciones generalizadas que impusieron las precauciones pandémicas el pasado mes de febrero, los distintos carnavales del municipio van saldando sus deudas festivas con el año 2022. Si bien a principios de abril se celebró el de Llano de Brujas y el pasado sábado Cabezo de Torres eligió a su muso y musa con una gran gala en la plaza Circular de Murcia, ayer fue el turno para el gran desfile del Carnaval de Beniaján.
Las veinte comparsas –tres de ellas foráneas– que recorrieron ayer la pedanía tuvieron, por lo pronto, que enfrentarse a un escenario no previsto inicialmente: el del pegajoso calor veraniego. Esta circunstancia llevó, primero, a retrasar el horario habitual de salida hasta las 20.30 horas, aprovechando, además, el mayor número de horas de luz. Por otra parte, muchos grupos optaron por adaptar los atuendos pensados para el frío mes de febrero a las condiciones propias de finales de junio, algo que no fue posible en todos los casos, con lo que a más de un participante le tocó sudar la gota gorda.
La colorida comitiva recorrió su itinerario habitual, saliendo del jardín José Cánovas Ortiz. El desfile contó en su vuelta, tras más de dos años en blanco, con una cabecera infantil, con distintos personajes, y una batucada. Cerraba esta marcha festiva una carroza encargada de repartir obsequios a los más pequeños. El recorrido concluyó, un año más, en el Pabellón de Deportes Monteazahar, donde se realizó la tradicional entrega de premios con reconocimientos al mejor traje, comparsa, maquillaje, coreografía y a la propuesta más original.
La celebración culminó, además, con una fiesta joven –dj incluido–, cerrando un largo fin de semana en el que, además, la periodista de 7TV María Pérez llevó a cabo la lectura del pregón –el pasado viernes– y se hizo un concurso de mojitos –el sábado–. El carnaval ha vuelto, esperando recuperar en 2023 su ritmo habitual.