El aplaudido gesto de Ignacio del Olmo con Paquita 'La Machacanta'
El comisario cedió raudo su silla a la hostelera, de 92 años, cuando le tocó permanecer unos minutos de pie junto al atril durante el discurso
Era el turno de Paquita 'La Machacanta' que, aunque contaba en todo momento con el apoyo y la compañía de su hija Antonia, a sus 92 años, le costaba un mundo andar unos pocos metros desde su silla hasta el atril. Había que leer el discurso de agradecimiento de pie, y eso a Paquita no le hizo mucha gracia. «92 años y estoy para morirme», soltó al público, que respondió con una carcajada. El portavoz del Grupo Municipal Socialista Ginés Ruiz Maciá, que estaba justo al lado, hizo el amago de cederle su silla, pero Paquita se negó, estoica, mientras su hija empezaba a leer las pocas palabras que habían preparado. Fue el discurso más corto de la mañana, pero a La Machacanta se le estaba haciendo eterno.
No podía ser otro que el jefe de la Policía Nacional de Murcia, Ignacio del Olmo, quien pusiera remedio a la situación. Sin pensárselo un segundo ni hacer preguntas de cortesía, se levantó de su asiento sobre el escenario, cogió su silla y se la acercó a la anciana para que se sentara, sin aceptar un 'no' por respuesta.
En ese momento, todo el teatro rompió en un aplauso de reconocimiento al gesto del comisario, que volvió a su posición, permaneciendo de pie hasta que alguien de la organización le puso otra silla (de sustitución) para que Del Olmo se volviera a sentar. Una demostración en directo de la impagable labor policial.
