Los animales de Murcia renuevan su protección
Un centenar de dueños se congregaron con sus mascotas junto a la ermita para recibir la bendición del santo y hacerse con los tradicionales panecillos
jesús nicolás
Martes, 17 de enero 2023, 15:19
Hasta San Antón Pascuas son. Y en el barrio advocado al patrón bien lo saben. Este martes la devoción y la pasión por los animales volvieron a conjugar en perfecta armonía a las puertas de la ermita que preside el jardín de la Seda. Ya a primera hora, los escasos dos metros de acera se quedaban pequeños para la cola de vecinos deseosos de hacerse con esos panecillos bendecidos, estampas y calendarios con la efigie del santo de origen egipcio.
La ermita, como era de esperar, se quedó pequeña para tanto fervor y tanto feligrés con transportin y correa. A los pocos minutos, las campanas llamaron a una eucaristía a la que no faltó una nutrida representación municipal. En primera fila se dejaron ver el alcalde, José Antonio Serrano, las concejalas de Salud y de Pedanías, Esther Nevado y Ainhoa Sánchez, y, por parte de la oposición, los ediles de Vox, Inmaculada Ortega y José Palma.
«Los animales son una fuerte compañía para muchas personas que están solas. Yo tengo la suerte de tener tres perros y dos gatos y para mi siempre es una delicia compartir rato con ellos porque siempre te reciben con alegría», expresaba en su salsa el regidor murciano.
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A su vera, acudió también a arropar a los parroquianos el presidente del Cabildo Superior de Cofradías, José Ignacio Sánchez, que se felicitaba de la vuelta de la normalidad y, con ella, de las procesiones. «Este fin de semana presentamos el cartel, ayer celebramos San Fulgencio y todo sin mascarilla. Así que, sí, estamos muy contentos».
Fuera de la iglesia, sin embargo, quedaron un centenar de feligreses que esperaron pacientes su turno para salpicar con el bendito elemento a sus mascotas. Y no solo habían perros y gatos. Una vez la fiesta vino con variedad en lo zoológico. La pequeña Alicia llegó en compañía de su pequeño hámster, Margarita, y conocía por primera vez la tradicional cita. «Me gustan mucho los animales. Le pediré a San Antón que sea feliz», contaba tímida. «Es que era fiesta en Molina, no tenía cole y hemos decidido acercarnos», decía su madre
Tortugas y canarios
Sofía también aprovechó que no había clases y se acercó también desde Molina al templo en compañía de su abuela y del que quizá sea su regalo de Papá Noel más esperado, su canario Pío Pío. «Los perros no le gustan mucho», reía la yaya. Con tanto gentío, el pájaro no sabía muy bien si cantar o callar y Tortu, el galápago de María, casi que prefería quedarse en el caparazón. «Estará echando de menos el agua», observaba poco antes de que el párroco le refrescarse con su particular 'remojón'.
Más pletóricos se les vio a los cofrades que recibieron gustosos a los murcianos en su casa y en su día grande. Ataviados todos con sus capas, entre ellos estaba Ana María Soto, vocal de Cultura y, a la sazón, orgullosa primera mujer estante de la Cofradía. A pocas horas de salir de nuevo a procesionar, decía no sentir los hombros cargados. «Me estrené con el Cristo del Consuelo, ayer llevé a San Fulgencio y hoy he convencido a otra chica para llevar a San Antón», decía, tan predispuesta siempre a lo que le echen.
Y es que, si bien hubo el año pasado bendición con restricciones, este año sí se dejará ver el santo por las calles del barrio camino de la iglesia de San Francisco Javier. El sábado la Cofradía ha preparado unos juegos infantiles y el domingo San Antón regresará a su ermita de la Seda. Por el camino, la Cofradía espera hacer buena caja para sus proyectos de colaboración con Cáritas y sus dos misiones benéficas en Bolivia y la República Centroafricana.
