Desafíos para la infancia

La mayoría de los asuntos referidos a niños y niñas que se consultan en el Barómetro preocupan en un alto grado a la ciudadanía. El interés que las personas que viven en la Región de Murcia manifiestan en los temas que afectan a la infancia, exige que esta tenga la prioridad que se merece en la agenda pública.

En relación con la lucha contra la pobreza infantil, un elevado porcentaje, el 75% de las personas entrevistadas, mayor en las mujeres (79,1%) que en los hombres (69,9%), muestra su total acuerdo con que debe ser una prioridad para los gobiernos, ya que, en la Región de Murcia, según datos del INE, 4 de cada 10 niños y niñas están en riesgo de pobreza y exclusión social (AROPE 38.8% 2023). A esta situación sumamos el reto en materia de protección de la infancia en cualquier entorno, físico o digital. Casi el 90% (87,7%) de las personas encuestadas, siendo mayor el grado de acuerdo en las mujeres (90,4%) que en los hombres (84,8%), señalan su preocupación por la insuficiente protección de la infancia frente a la violencia, especialmente la digital, en la que cada vez se observan más problemáticas.

A los riesgos respecto a la violencia frente a la infancia, se suma la preocupación que muestran más del 85% (86,1%) de las personas participantes, con más grado de acuerdo en las edades intermedias (90% entre 31 y 64 años), sobre el bienestar emocional de niños y niñas.

Más de la mitad (54,7%) de los encuestados, una vez más en mayor grado las mujeres (59,8%) y las personas de más edad (65 años o más), han identificado, siendo esta una realidad poco conocida y generadora de debate, como muy necesario abordar la situación de los niños y niñas migrantes no acompañados o refugiados, por tratarse de un colectivo especialmente vulnerable en el ámbito de la protección y que en ocasiones requiere un apoyo específico por el desarraigo que arrastran y el riesgo de ser víctimas de violencia, abuso y explotación.

Todos estos desafíos se han de afrontar contando con la propia visión de los niños y las niñas. El artículo 6 de la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) de Naciones Unidas establece que tienen derecho a ser informados, a expresar sus temores y dudas y a participar en la toma de decisiones de los temas que les afectan como ciudadanos de pleno derecho. Sin embargo, solo un tercio (35,4%) de las personas encuestadas, con un mayor porcentaje de personas de 46 a 65 años (39,4%) frente a las más jóvenes (29,4%), han considerado que es importante contar con la voz de la infancia.

Las respuestas mostradas en este Barómetro permiten aconsejar la necesidad de una inversión suficiente, adecuada y en clave de infancia y en condiciones de equidad, que llegue de forma efectiva a los hogares más vulnerables, como el modo más efectivo de luchar contra la pobreza infantil.

Asimismo, de sus respuestas se deduce que resulta imprescindible garantizar el uso seguro y responsable de la tecnología, con las necesarias actuaciones de prevención, detección y reparación de las situaciones de riesgo, principalmente de violencia hacia la infancia. Existe también un amplio consenso sobre que mantener una buena salud mental desde edades tempranas es crucial para el desarrollo físico y emocional, así como para adquirir habilidades sociales y afrontar desafíos en etapas posteriores. Resulta, por tanto, crucial reforzar los programas de salud para un abordaje efectivo del bienestar emocional de los más jóvenes.

Y, por último, no cabe duda de que oír la voz de los chicos y chicas sobre las cuestiones que les afectan, a través de mecanismos adecuados como un órgano de participación infantil autonómico, si bien, no es visto como una necesidad urgente por una parte importante de la ciudadanía consultada es, además de un derecho reconocido por Naciones Unidas, una buena fórmula para acertar en la mejora de su bienestar, en la línea de lo que el Barómetro señala como opinión ampliamente compartida y que debe por lo tanto impulsar la actuación de los poderes públicos.