Otros 17 argelinos se fugan de de Cabezo Beaza tras dar positivo por Covid un compatriota
La Guardia Civil detuvo en distintas zonas de Cartagena a trece de los inmigrantes que huyeron para evitar la ampliación de su cuarentena
En el cuarto incidente similar en apenas veinte días en Cartagena, diecisiete argelinos llegados días atrás en pateras abandonaron este jueves la cuarentena obligatoria por el riesgo de contagio de coronavirus y se fugaron del polígono deportivo Cabezo Beaza. Lo hicieron tras confirmarse el contagio de uno de ellos por coronavirus y para evitar ver prolongado su encierro. El confinamiento obedece a que, en su travesía por el Mediterráneo, tuvieron contacto con personas que dieron positivo. Se trata de la cuarta escapada de inmigrantes desde el 25 de julio.
Hacia las 12.20 horas, los inmigrantes salieron corriendo campo a través (por los terrenos contaminados de la antigua fábrica de Español del Zinc), lo que obligó a movilizar varias patrullas de la Guardia Civil. Esta custodia desde hace dos semanas la instalación municipal junto a vigilantes privados. Fuentes de la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia aseguraron que cuatro de los inmigrantes fueron detenidos en la hora siguiente. Otros dos fueron localizados por la tarde en la estación de autobuses por la Policía Nacional. Faltan, así, ocho por localizar. De entre estos últimos, al parecer otros dos lograron abandonar la ciudad en un coche, tras ser recogidos en la carretera que conecta el polígono con La Aparecida. Faltan así ocho por localizar. De entre estos últimos, al parecer Ellos mismos habrían llamado por teléfono a sus contactos. Los inmigrantes estaban a la espera del resultado de un test PCR y, por razones que no han sido aclaradas, se escaparon.
Arrestado un traductor
Tras la huida, hubo momentos de tensión en el pabellón, hasta el punto de que, según fuentes conocedoras del incidente, un traductor voluntario de Cruz Roja fue detenido por la Policía Nacional, por un presunto delito de resistencia a la autoridad. Se habría negado a facilitar datos personales de los inmigrantes a un capitán de la Guardia Civil. Quedó en libertad tras declarar en comisaría.
La Delegación dice que los vigilantes de Salud se vieron sorprendidos
La Delegación del Gobierno afirmó que «la huida se produjo sin que el personal de seguridad privada, contratado por la Consejería de Salud y que se encontraba en el interior del pabellón, pudiera advertir la situación y avisar a los agentes de la Guardia Civil, que se encuentra en el exterior». Además, pidió a Salud aclarar si los inmigrantes deben guardar una nueva cuarentena, tras haber estado 14 días confinados. Asimismo, frente a la críticas del Gobierno regional el Ministerio de Migraciones defendió que su protocolo sanitario pretende recoger las medidas necesarias para evitar contagios en los espacios de su competencia. La norma afecta a distintas administraciones, a las que pidió «colaboración».
