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Vecinos y trabajadores de Villas Caravaning de La Manga protestan en Cartagena para pedir la reapertura de instalaciones
Más de un centenar de concentrados esperaron vestidos de negro luto en la plaza San Francisco la salida de los representantes vecinales y la empresa, que mantuvieron una reunión con el concejal de Urbanismo
Los vecinos de Villas Caravaning han sacado su protesta a la calle. Descontentos y preocupados a la par por la decisión tomada por el Ayuntamiento de precintar todos los espacios comunes como el supermercado o las pistas deportivas, todos ellos reclamaban este miércoles frente a la sede municipal de San Miguel que se reabran todas las instalaciones cerradas. En su mayoría acudieron vestidos de negro en señal de luto.
El Ayuntamiento llevaba esperando desde 2022, cuando los informes de Urbanismo concluyeron que las instalaciones incumplían las medidas contra incendios, para proceder a cerrar el recinto, explotado por la mercantil francesa Capfun. Tras un largo periplo judicial en el que la empresa ha tratado de retrasar este desenlace, el lunes el Consistorio dio cumplimiento a la orden judicial que da la razón a los servicios técnicos municipales y a los Bomberos.
Este pasado martes, día posterior a la visita de la Policía Local al recinto de La Manga, los vecinos mantuvieron una reunión con Capfun, donde acordaron convocar la protesta que ha tenido lugar este miércoles.
A la salida de la reunión con los representantes vecinales de los propietarios residentes y la empresa, el Ayuntamiento difundió unas declaraciones del concejal de Urbanismo, Diego Ortega. El edil reiteró que el camping tenían orden de cierre desde 2022 y que esa situación se vio «agravada» por la instalación de mobil-homes sin licencia.
Ortega también señaló que la empresa, si quiere reabrir, debe redactar un Plan Especial que ordene los usos y construcciones autorizadas dentro del recinto. «Nos hemos comprometido con ellos a trabajar con toda la celeridad en cuanto vayamos teniendo documentación técnica que aporte la empresa propietaria», afirmó.
Asimismo, el edil manifestó que los vecinos propietarios de sus parcelas en el interior del camping podrán seguir contando con toda la asistencia social que brinda el Consistorio.
Este mismo miércoles, además, el Ayuntamiento recibió notificación del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Cartagena rechazando la petición de medidas cautelarísimas solicitada por la empresa, según trasladan fuentes municipales a este periódico.
«Nos tienen que ayudar»
El presidente de una de las dos asociaciones de vecinos, Juan García, señala a este diario que, durante la reunión, solicitaron del Ayuntamiento toda la ayuda posible para poder regularizar las instalaciones. «Nos tiene que ayudar. Es el único que puede volver a restituir todas las instalaciones», recalcó.
Sobre el Plan Especial, García señaló que «Capfun tiene ya un arquitecto que ha hecho planes especiales en otros camping, que tiene experiencia y capacidad y que lo pondría a trabajar conjuntamente con las dos asociaciones. Dentro del bloque estaría el Plan de Autoprotección, que sería el primero a presentar».
García defendió asimismo que muchas de las zonas comunes precintadas como pistas deportivas y piscinas se encuentran en buen estado y solicitó que los técnicos las volvieran a inspeccionarlas. No obstante, el representante vecinal aseguró no tiene mucha esperanza en que se pueda reabrir nada para este verano.
«Creo no podíamos pedir más cosas al concejal, ni el concejal amparándose en la ley podía ir más allá teniendo a los técnicos en contra», lamentó García, que espera que Capfun no decida abandonar la explotación del residencial.
Capfun carga contra los vecinos
Este martes, antes de la reunión, la empresa Capfun envió un comunicado en el que hacía detalle de la historia del camping y las vicisitudes que ha atravesado la licencia y su expediente. La firma francesa, asimismo, denunció que el cierre de las instalaciones deja a 150 empleados en la calle y reiteró que les obliga a cancelar 20.000 reservas.
La situación, señaló Capfun «está afectando gravemente y de forma duradera a la economía turística de la Región». A juicio de la mercantil, las medidas «se han adoptado exclusivamente frente al camping, que cumple la normativa, y no frente a las obras ilegales de los propietarios particulares, fuente del único y verdadero problema, frente a los que no se ha dirigido, hasta el momento, ninguna actuación municipal»
La empresa cerraba su comunicado haciendo un llamamiento al diálogo y solicitando la apertura inmediata de «un grupo de trabajo conjunto entre Ayuntamiento, camping, propietarios privados y asociaciones de vecinos para definir un plan de regularización pragmático y garantizar la viabilidad del enclave».
El PSOE pide al Ayuntamiento que tramite el Plan Especial «con urgencia y agilidad»
El Grupo Municipal Socialista exigió este miércoles al equipo de gobierno que se garanticen los servicios mínimos a los usuarios de Villas Caravaning, tales como agua, electricidad, limpieza y seguridad, para evitar que estas instalaciones se conviertan en un gueto.
Asimismo, desde el PSOE reclamaron a la empresa que «presente con celeridad el Plan Especial para la zona y al ejecutivo local y a la alcaldesa que lo tramiten con urgencia y agilidad para dar respuesta a los vecinos que residen en estas instalaciones».
El portavoz de los socialistas, Manuel Torres, se unió este miércoles a la protesta de los vecinos, acompañado de los concejales Isabel Andreu y Pedro Contreras, para mostrarles su apoyo.
