El Rosell acogerá en Cartagena todas las cirugías oculares en quirófanos inteligentes a partir de junio
Tras la modernización de las salas, el hospital hará intervenciones complejas que descongestionarán el Santa Lucía y ayudarán a reducir las listas de espera
Reducir las listas de espera operando más, mejorar los tiempos de recuperación y aumentar la seguridad del paciente. Ese es el objetivo que se marca el Servicio Murciano de Salud (SMS) una vez que los 25 quirófanos del área de salud de Cartagena estén modernizados. Las obras comenzaron hace un mes en el Hospital Santa María del Rosell y la previsión es crear en este un gran bloque quirúrgico para aglutinar todas las intervenciones de la especialidad de Oftalmología. El pasado año, en la zona sanitaria, que engloba Cartagena, Mazarrón, Fuente Álamo y La Unión, se llevaron a cabo 3.612 cirugías oculares y buena parte de ellas se realizan en clínicas concertadas de la comarca y de Murcia.
En el Rosell habrá dos quirófanos inteligentes dedicados exclusivamente a esas operaciones. Tendrán de apoyo una nueva sala blanca para la preparación de las inyecciones intravítreas -para tratar enfermedades oculares y proteger la visión-, entre otras. La intención es mejorar la calidad asistencial en una patología cuyo número de pacientes incrementa cada año por el envejecimiento de la población.
Así lo anunció ayer el consejero de Salud, Juan José Pedreño, en su visita al hospital del Paseo de Alfonso XIII. En su recorrido supervisó los trabajos que se llevan a cabo en los diez quirófanos. Estos, tras la reforma, estarán considerados inteligentes, ya que estarán dotados de sistemas informáticos que permitirán la comunicación de sus dispositivos, de conexión para compartir imágenes e información con otros puntos y de acceso a la historia clínica del paciente para poder consultarlo en el momento.
Más espacio para el Santa Lucía
Pedreño está convencido de que además de incrementar el número de operaciones oftalmológicas, también se podrá aumentar la complejidad de las intervenciones en el Rosell, y así, de paso, se dejará espacio en el Santa Lucía para realizar otras. Esto, a su juicio supondrá «un antes y un después en la actividad realizada hasta el presente en este recinto hospitalario».
Otra de las novedades con las que estarán equipadas las salas es de un sistema de grabación, con el que «las cirugías podrán visualizarse tanto en el salón de actos como en otros hospitales de cualquier parte del mundo, con la ventaja de que eso supone en cuanto a formación y docencia», dijo el consejero.
La reforma de los dos bloques quirúrgicos será una de las grandes inversiones del Servicio Murciano de Salud (SMS) para este 2023 en Cartagena. Incluirá la modernización de los equipamientos, de la tecnología y del mobiliario. La inversión prevista, según la Consejería de Salud, es de 8,3 millones de euros.
Tendrán nuevos equipos de videolaparoscopia con fluorescencia en tres dimensiones, motores de cirugía ósea y equipos de injertos de piel
Las nuevas salas de operaciones estarán acabadas en junio, según Pedreño, tras lo que le tocará el turno a las 15 del Santa Lucía. Estas podrían entrar en funcionamiento a finales de este año. Para evitar que las listas de espera se disparen durante este tiempo, la Gerencia del área de salud ya está derivando a pacientes a las clínicas concertadas y operando por las tardes.
El gran contrato incluye modernas mesas y lámparas quirúrgicas para llevar a cabo operaciones de diversa complejidad. Una de las novedades es que podrán ser retransmitidas para ser aprovechadas por alumnos y profesionales de otros hospitales.
Capacidad docente
La mejora de la integración de los quirófanos ayudará en la visualización de las lesiones durante la operación, lo que redundará en un mayor número de intervenciones y en una mayor eficacia en su tratamiento. Por otro lado, supondrá una notable mejora en la capacidad docente, al permitir el archivo y visualización de imágenes y pruebas a médicos y estudiantes en formación.
Por su parte, la modernización de los quirófanos de Angiología y Cirugía Vascular permitirá aumentar la capacidad de diagnóstico intraoperatoria y tratar patologías isquémicas de modo más eficiente.
Mientras, los equipos que servirán para obtener información del estado de las estructuras y tejidos del cuerpo, como microscopios, ecógrafos de alta definición y el navegador cráneomaxilofacial, aumentarán el nivel de resolución y la eficacia quirúrgica. Estas tecnologías se complementarán con nuevos equipos de videolaparoscopia con fluorescencia en tres dimensiones, motores de cirugía ósea y equipos de injertos de piel, entre otros.
La Unidad de Daño Cerebral Adquirido abrirá este año
La Consejería de Salud trabaja ya para abrir este mismo año dos nuevos servicios en el hospital Santa María del Rosell. Concretamente, la Unidad de Daño Cerebral Adquirido y la de Odontología orientada a pacientes oncológicos.
El que más avanzado está es el del daño cerebral. Para ello, Salud ha destinado más de 200.000 euros. Tras un accidente cerebrovascular, como un ictus, un tumor cerebral, un traumatismo craneoencefálico o una hipoxia, la vida cambia en un instante. Se pierden facultades y la capacidad de realizar actividades diarias. En este caso, el tiempo es crucial y una actuación temprana en las primeras 24 o 48 horas aumenta las probabilidades de que el paciente recupere ciertas habilidades, aprenda de nuevo a caminar o sea autosuficiente.
A esta se sumará el de atención bucodental a pacientes oncológicos y la Unidad de Daño Cerebral Adquirido. Según datos de la Consejería de Salud, en los últimos cinco años, en el hospital del Paseo de Alfonso XIII han sido invertidos 9,5 millones de euros para poner en funcionamiento «servicios dentro de un proyecto que da respuesta sanitaria adecuada a las necesidades del Área II, derivadas del envejecimiento y de la descompensación frecuente de la patología crónica de la población», explicó el consejero de Salud, Juan José Pedreño.
Por otro lado, la Asamblea Regional rechazó ayer miércoles una moción presentada por el PSOE, en la que se pedía garantizar que los centros de salud y consultorios de Cartagena se mantuvieran abiertos y con todos los servicios en todas las épocas del año.
Fue defendida por Carmina Fernández, la viceportavoz socialista, y en ella también exigió de cara al verano que se contrate a más personal, teniendo en cuenta el incremento de población en Cartagena en esa época. También exigió que se cubran bajas y vacaciones de los sanitarios, especialmente de la zona oeste.