«Después de lo que he pasado, un simple pollo asado, para mí, es un manjar»

Le vemos en la iglesia, celebrando misa, pero no podemos imaginar cuánto ha sufrido por dentro y cuánto sufre por los demás. Nació en Ruanda, concretamente en Nykmiyaga, una ciudad más pequeña que Cartagena pero con muchísima más población.

Hijo de una familia medio-alta, su padre, Francois, fue maestro, juez, alcalde y de nuevo juez. Recibió una excelente educación cristiana en el colegio donde su madre, Bernadette, ejercía de maéstra: el Colegio Mukinga.

-¿Cuándo recibió usted la llamada de Dios?

-Entré en el seminario menor, y fue allí, con 15 años, cuando sentí la necesidad de servirle a Dios a través de servir a los demás.

Estando en el seminario menor, empieza la guerra civil en su país. Vio genocidios, matanzas entre ruandeses, fue horrible. En 1994 derribaron el avión presidencial, muriendo el Presidente del país, y al día siguiente, un 7 de abril, comenzaron las masacres entre ruandeses, enfrentándose las dos etnias, que se acusaban mutuamente de haber sido los artífices del atentado.

Todo eso le pilla en el seminario mayor, dispuesto a llegar a sacerdote. Tiene que huir con su familia a un campo de refugiados en el Congo cuatro años. Allí se volcó en ayudar a los refugiados, cuidando ancianos, educando a los niños sin padres e impartiendo el amor en Cristo. En 1997 atacaron los campos de refugiados para disolverlos, viendo morir a mucha gente, en un horror sin sentido. Se ve obligado a volver a Ruanda, entrando de nuevo en el Seminario, donde le detuvieron y encarcelaron, por religioso y por hijo de un hombre honesto que luchó por su país, muriendo en un campo de refugiados.

De la cárcel vuelve al Seminario, enviándolo el Obispo de la zona, en el 2009, a terminar sus estudios de sacerdote en el Seminario mayor San Fulgencio de Murcia. Fue ordenado sacerdote el 20 de junio de 2013 por el Obispo José Manuel Lorca Planes, siendo su primer destino nuestra ciudad, Cartagena, como coadjutor de la Parroquia de Santa María de Gracia y de la del Carmen.

En el 2015 lo nombran Párroco de San José Obrero, Rector de San Marcos de la Vaguada, Párroco de Nuestra Soledad de los Molinos Marfagones y capellán hospitalario.

-A ver, Padre, ¿la gente le ha rechazado por su color de piel?

-Jamás, todo lo contrario, he sido tratado tan bien, que creo que no merezco tanto cariño. Yo quise ser sacerdote para saciar una ilusión, como es ayudar a las personas, acercándolas a Jesús y a Él acercándole a ellas, mostrándoles que la vida tiene sentido a pesar de los problemas, por muy graves que sean.

-Como religioso, ¿cómo ve la pandemia?

-Como una oportunidad de sacar, del ser humano, lo mejor que lleva dentro, ayudando a todo el que esté necesitado. Desde Cáritas ayudamos a todos los que nos lo piden, incluso a domicilio, sin distinción de ningún tipo, sea o no cristiano, crea o no en Jesucristo. Seguimos su mandato: «Pedid y recibiréis».

-¿Hay mucha persecución de cristianos por el mundo?

-Sí la hay, demasiada, y tan solo por el 'pecado' de transmitir la forma de vida de Jesús y su mensaje. Incomprensible.

-Por lo tanto, en la actualidad, como en tiempos remotos, ¿sigue habiendo mártires?

-Los hay, muchos, más de los que debería haber.

-Dígame una frase de Jesús que le guste mucho.

-Haced con los demás lo que Yo he hecho con vosotros: serviros.

-Bueno, Padre, ¿es usted de buen comer?

-Después de lo que he pasado, un simple pollo asado, para mí, es un manjar.

-Su música favorita es...

-Ghospel

-Padre, cómo nota que solo hay un Dios.

-Yo hablo con él, y Él habla conmigo, me habla al corazón, incluso a través de otra persona, y yo lo escucho.

-Entonces, ¿este momento puede estar guiado por Él?

-Seguro que sí.

-¿Qué les diría a los jóvenes que no creen en nada?

-Que escuchen y vean, Dios siempre habla y está ahí, en todas partes.

-¿A qué aspira usted, Padre?

-San Francisco decía: «Hazme un instrumento de tu paz, Señor»... a servirles a todos los que lo necesiten a cambio de nada ..., bueno, a cambio de complacer al Señor.

-¿Qué tal el Papa actual?

-Me encanta. De él, del Obispo Don José Manuel Lorca Planes y del Vicario Don José Abellán tengo tanto que aprender, que tengo la sensación de no haber empezado todavía a caminar.

-Pues Padre, rece por nosotros, que muchos lo necesitan y... este aficionado a los selfis más que ninguno.

Nuestro Selfi con Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, como testigo. ¿Teresa en Calcuta... Methode en Cartagena?... Solo Dios lo sabe.