La Comunidad construirá el local multiusos de La Manga en Monte Blanco pese a las críticas
El Gobierno regional y el Ayuntamiento de Cartagena se apoyan en la petición de una asociación vecinal, que niega ese respaldo, y de los empresarios; desoyen a partidos y ecologistas para urbanizar un solar municipal cercano al Mar Menor, con un 80% de fondos europeos
El Ayuntamiento de Cartagena y la Comunidad Autónoma han desoído las críticas de varios partidos políticos (MC, Unidas Podemos y PSOE), asociaciones ciudadanas y la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) al proyecto de construir un centro multiusos en una parcela municipal en Monte Blanco y, con ello, a la petición de buscar una ubicación alternativa a una de las pocas zonas aún vírgenes de La Manga del Mar Menor.
El Consejo de Gobierno regional aprobó este jueves la firma de un convenio de colaboración entre ambas administraciones para edificar el local y abrir los accesos viarios, lo que costará 1,9 millones de euros y será financiado en un 80% con fondos europeos.
El Ejecutivo autonómico, en una reunión presidida por Fernando López Miras, aprobó la propuesta del consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga. Y, en un comunicado, explicó que «esta infraestructura es una de las iniciativas de 'La Manga 365', proyecto estratégico del Ejecutivo regional para dotar a este enclave único en Europa de nuevas infraestructuras y servicios».
El objetivo, añadió el Gobierno, es «convertirlo en un lugar más atractivo para vivir durante todo el año». Y precisó que las actuaciones supondrán una inversión de 1.861.239 euros, «cofinanciados al 80% con Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder)». El 20% restante «lo asume la Comunidad».
Fuentes de la Consejería reiteraron la respuesta que dieron en julio: que Monte Blanco «es el único espacio de uso urbano disponible ofrecido por el Ayuntamiento» y que «las funcionalidades de este edificio dan respuesta a las propuestas realizadas por los vecinos y empresarios de la zona durante las jornadas de definición de 'Estrategias de Desarrollo contra la Estacionalidad'», señalaron. Ese encuentro, agregaron, tuvo el «objetivo de fomentar la creación y consolidación de empresas en los sectores económicos no estacionales de La Manga». En la alcaldía, que dirige Noelia Arroyo, señalaron que se trata de un proyecto que se inició con el anterior gobierno, en una parcela urbanizable». Y añadieron que «la Asociación de Vecinos de La Manga Veneziola lo apoya, porque se van a instalar servicios».
Sin embargo, este colectivo publicó un mensaje en Facebook en el que aseguró que no respalda este proyecto. Fuentes de la alcaldía afirmaron que este colectivo vecinal sí dio públicamente su apoyo en verano a través de las redes sociales. El Consistorio no concretó ningún respaldo más a este polémico plan.
Fuentes municipales aseguraron que la Concejalía de Urbanismo, que dirige la vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, no incluyó en su reciente consulta a Fomento si este proyecto está afectado por las limitaciones urbanísticas de la Ley de recuperación y protección del Mar Menor. Sí le preguntó por los proyectos para levantar 1.300 viviendas en distintas áreas, incluida la Cala del Pino, en La Manga. Señalaron que es un asunto que lleva la Concejalía de Infraestructuras, que gestiona María Casajús, del PP.
ANSE: «Lo hacen sin consulta»
«El Ayuntamiento y la Comunidad siguen empeñados en acabar con los últimos rincones sin urbanizar en La Manga y parece que hayan decidido dilapidar las ayudas europeas para el Mar Menor en una mayor destrucción, en lugar de recuperación y restauración», denunció ANSE.
Su director, Pedro García, advirtió además de que «han aprobado un proyecto sin ninguna información ni consulta previa», a pesar de que «existen alternativas en zonas urbanas e infraestructuras en desuso».
