Autismo Somos Todos crece con 'La Finquita'

Un segundo hogar en un enclave privilegiado de la zona oeste cartagenera para que personas con trastorno del espectro autista entren en contacto directo con la naturaleza, fortalezcan sus lazos con otros compañeros de Autismo Somos Todos y continúen con sus terapias. Este refugio ubicado en la diputación de Los Puertos de Santa Bárbara, llamado cariñosamente 'La Finquita', iniciará su actividad en octubre para proporcionar también el servicio de respiro familiar a aquellos padres que necesitan un lugar de confianza donde dejar a sus hijos de forma puntual.

De momento, la asociación Autismo Somos Todos trabaja a destajo para acondicionar la finca rústica de 2.515,50 metros cuadrados de superficie donada hace dos años por un particular, que prefiere mantenerse en el anonimato.

Los obreros reforman las dos entradas disponibles para que sean totalmente accesibles, después de que los padres hayan pintado el interior y adaptado el mobiliario a las necesidades de sus futuros inquilinos, así como a los recursos que ofrecerán en este inmueble.

La junta directiva de Autismo Somos Todos prevé habilitar las habitaciones de las dos plantas de 'La Finquita' para que los usuarios de la asociación puedan dormir allí asistidos por un terapeuta y ofrecer un respiro a las 200 familias asociadas, con más de un miembro afectado por este trastorno en la mayoría de los casos.

Autismo Somos Todos tiene a familias en lista de espera porque cada día aumenta el número de personas diagnosticadas por este trastorno. Desde la asociación insisten en que no es una moda pasajera y reclaman más empatía para aligerar la mochila de estas personas y sus allegados, en vez de poner más trabas en sus caminos.

El personal de Autismo Somos Todos y sus voluntarios impartirán diversos talleres en el sótano, mientras que el huerto servirá para poner en marcha terapias con el entorno natural como principal herramienta. Diferentes estudios coinciden en señalar las múltiples ventajas de la interacción con la naturaleza en el desarrollo de habilidades de las personas con trastornos del espectro autista.

Autismo Somos Todos también pretende recuperar las convivencias familiares en su nueva propiedad para compartir experiencias.

«'La Finquita' es un regalo. Tenemos los recursos limitados y disponer de este gran espacio nos ayudará mucho a avanzar en los servicios que ofrecemos. Será un soplo de aire fresco para todos y una oportunidad para seguir mejorando la calidad de vida de las personas con autismo y sus familias», reconoce la presidenta de este colectivo, Gloria Alemán.

Otra de las prioridades para la asociación es conseguir un vehículo para desplazar a los usuarios desde su céntrica sede en la calle Lope de Rueda hasta 'La Finquita', en Los Puertos de Santa Bárbara.

No obstante, la asociación continuará proporcionando sus servicios a los usuarios y sus familias en su sede alquilada de la calle Lope de Rueda. Por ahora, la asociación realiza terapias individuales y presta orientación y asesoramiento a las familias y personas afectadas, tanto jóvenes como adultos. Proporciona atención terapéutica en edad temprana, desde bebés a menores de seis años, así como servicios de logopedia y psicomotricidad, entre otros recursos.

El local es céntrico, una de las condiciones indispensables para poder desarrollar con éxito su Unidad Integrada en la Comunidad (UIC), en la que diez personas con autismo mayores de 16 años aprenden a desenvolverse con soltura en sus rutinas diarias: compran en el mercado público y las grandes superficies para cocinar después, adquieren hábitos saludables de higiene y cuidado personal, se desplazan en autobús y recorren las calles del centro para realizar sus gestiones. La asociación inaugurará en octubre la nueva cocina de su sede.

La ilusión de Autismo Somos Todos y de las familias asociadas es que más pronto que tarde su proyecto de pisos tutelados sea una realidad para que los jóvenes con autismo desarrollen sus vidas con plena autonomía. Pero para ello, «hace falta mayor implicación de las administraciones», reivindica Alemán.

Las familias hacen un gran esfuerzo económico para sufragar los múltiples proyectos de Autismo Somos Todos porque las subvenciones, que tanto agradecen, siempre se quedan cortas para las iniciativas de unos padres que procuran una vida sin limitaciones a sus hijos, lo más independiente posible. Uno de los eventos con los que visibilizan el autismo y recaudan fondos es su ruta solidaria de primavera. «Es increíble cómo Cartagena se vuelca cada año», celebra Gloria Alemán, quien recuerda que hay otras muchas formas de colaborar en la web 'autismosomostodos.org'.

Temas

• Cartagena
• Autismo