Los colegios tendrán en un mes los buzones contra el acoso escolar

Los colegios murcianos estrenarán en un mes los 'Buzones Help' (ayuda, en inglés) para recoger las denuncias de acoso a estudiantes. Se trata de una de las medidas principales recogidas en el Plan Regional para la Mejora de la Convivencia Escolar 2017-2020, presentado ayer en la Asamblea Regional por la consejera de Educación y Universidades, María Isabel Sánchez-Mora.

Esa estrategia contempla la aplicación de ochenta medidas para asegurar la buena convivencia y prevenir el 'bullying' en los centros de enseñanza. La Comunidad destinará este año 310.000 euros para proporcionar a los docentes recursos y formación, así como para concienciar a los alumnos y a la sociedad sobre la necesidad de combatir un problema creciente. En la actualidad, 450 profesionales específicos, como orientadores, profesores técnicos de servicios a la comunidad e inspectores, atienden esos casos.

Sánchez-Mora implicó en su plan a toda la sociedad. Las principales líneas de actuación van encaminadas a aumentar la sensibilización y el trabajo conjunto de todos los sectores sociales, incrementar los canales de difusión de la información, reforzar la formación, así como implantar mejoras que ayuden a detectar y prevenir situaciones que alteren la convivencia en la escuela.

La Consejería ya tiene activados cinco programas de prevención del acoso, que llegan a 54.424 alumnos, aunque los protocolos pueden alcanzar a los 250.000 niños y jóvenes matriculados en la Región. Además de los 'Buzones Help', Sánchez-Mora destacó la implantación de «proyectos pilotos e innovadores», como la iniciativa 'Redponsables' para afianzar la figura de los alumnos mediadores. Educación activará una plataforma digital que conectará a todos los colegios y permitirá el intercambio de experiencias e información. La consejera predijo que la intensificación de esas medidas propiciará que afloren nuevos casos de acoso. En su opinión, eso no es malo, porque de lo que se trata es de detectarlos -si los hay, puntualizó- para tratarlos adecuadamente.

«Oportunismo político»

Choni Ludeña, del PSOE, alertó de que el plan es un conjunto de medidas improvisadas, implantadas sin evaluar las anteriores y con alta probabilidad de fracasar, porque el profesorado soporta una alta carga lectiva que impide atender bien al alumno.

El portavoz de Podemos, Óscar Urralburu, lamentó que la presentación del plan se hizo un mes después del suicidio en Murcia de una menor que denunció acoso en su instituto. «Es un ejemplo más de oportunismo político trayendo aquí un plan del que nada conocemos». Recordó que un informe de la ONG Save the Children sitúa a Murcia como la Comunidad con más casos de acoso escolar: un 11%, tres puntos por encima da la media nacional. El diputado echó en falta medidas para combatir el 'bullyng' fuera de las aulas y el ciberacoso.

Juan José Molina, de Ciudadanos, reclamó medidas preventivas de eficacia contrastada, como el Plan Kiva, un modelo finlandés que aísla a los acosadores y ha mostrado su eficacia. Murcia necesita un «verdadero plan de prevención, no de convivencia», reclamó.

Frente a las críticas de los otros partidos, el diputado del PP Víctor Martínez-Carrasco defendió el plan «porque es bueno. Hay un trabajo hecho, abundante, a través del Observatorio de Violencia Escolar», aseguró. Ahora será complementado con más formación para los docentes, la implicación familiar y una mayor sensibilización social. «Creo que va a dar un buen resultado», auguró.