Así hemos contado en directo la Romería de la Virgen de la Fuensanta en Murcia

La Morenica ha regresado a su casa, a su santuario, tras seis horas de romería.

Fuera y dentro del templo se escuchan gritos de 'Viva la Morenica' y 'guapa' de los miles de fieles que no han querido perderse su subida

No cabe ni un alfiler en el entorno del santuario.

«Bienvenida a casa», le ha dicho sor Leo, de las Hermanas Pobres de Santa Clara, a la Morenica tras dedicarle una canción desde los balcones del convento anexo

La Virgen de la Fuensanta llega a las puertas del santuario tras más de seis horas de romería, en las que ha estado acompañada por miles de fieles que no han querido faltar a la cita con la patrona de Murcia.

Los aledaños del santuario, a reventar de público, salvas y aplausos. La Morenica está ya frente a la puerta de su refugio en el monte.

Comienza la subida de las siete cuestas hasta el Santuario de la Fuensanta

Petalada a la Virgen antes de iniciar la subida por las cuestas hacia el santuario

Foto: José Luis Ros Caval / AGM

Junto al santuario esperan ya las Hermanas Pobres de Santa Clara, custodias de la Patrona. Este año han colocado una barraca con montaditos Morenica, de sobrasada, jamón y queso, para recaudar fondos y crear una casa de espiritualidad y retiro.

No podía regresar la Fuensanta a su santuario sin recibir una doble petalada desde los balcones de Algezares. El alcalde de Murcia, José Ballesta, ha sido lanzador de excepción de decenas de pétalos a la Morenica desde La Rosaleda. Ahora queda la parte más dura de la subida, dado el desnivel del terreno y el fuerte calor.

La Virgen continúa su ascenso hacia el santuario acompañada de romeros que han ido a su lado durante todo el camino desde la Catedral.

A su paso, muchos padres levantan a sus bebés para acercarlos hacia la Morenica para que esta los bendiga y proteja

Por el Día del Monte Limpio, los voluntarios de la Federación regional de Montañismo regalan gorras a los romeros.

La Patrona de Murcia, en la rotonda de entrada a Algezares. El público aplaude su llegada.

La Policía Local precede a la comitiva y abre paso al trono en el que los anderos llevan a la Morenica en volandas, de vuelta a su cada vez más cercano santuario. Si todo va según lo previsto, en algo más de dos horas llegará a su casa en el monte.

«Mira que ningún año me acuerdo de venirme a que me hagáis de almorzar...». Así se queja, entre bromas, una romera ante una de las mesicas que los vecinos más veteranos de la avenida Región de Murcia han preparado, con embutido, tortilla y mistela, para convidar a los peregrinos.

Algunos peregrinos se sientan en las aceras para coger fuerzas de cara al tramo final. «Siéntense aquí, que desde aquí se ve muy guapa la Virgen», comenta un vecino de la avenida Región de Murcia a una pareja de romeros. Él va descalzo, cumpliendo una promesa.

La Patrona se encuentra ya en el Reguerón. El paisaje urbano deja paso a la huerta y al monte.

Muchos romeros han decidido adelantarse a la Patrona para llegar antes a Algezares y disfrutar de una merecida parada de descanso.

Bebidas frías compiten con cirios y churros como artículos más buscados por los peregrinos en este martes de Romería.

A uno y otro lado del Reguerón, las huellas de la Romería empiezan a ser más que visibles.

Fila de romeros, haciendo cola para acceder a uno de los baños públicos portátiles instalados a lo largo del itinerario hacia el Santuario de la Fuensanta.

La comisión de fiestas del Progreso, a la espera de la Fuensanta.

Tañen las campanas de Nuestra Señora de la Esperanza, esperando la llegada de la Patrona de Murcia. Los vecinos del barrio del Progreso ocupan sillas plegables, algún banco público -casi inéditos-, terrazas y hasta los escalones de entrada de alguna casa baja frente a la parroquia. Los abanicos van a todo ritmo en manos de los romeros.

Una de las siete ambulancias que Cruz Roja aporta al operativo de Seguridad en la jornada de hoy. Su conductor cuenta a LA VERDAD que, hasta el momento, no ha tenido que atender incidencia alguna, pero que desconoce si otros compañeros sí lo han hecho.

Se suceden en los altos del camino los tradicionales «viva la Virgen de la Fuensanta», «viva la Morenica» y «guapa, guapa y guapa».

La comitiva agradece el ensanchamiento del trazado al final de Pío XX. El sol aprieta y la devoción, también.

«Hace 'mucha' calor y hay mucha gente», se queja entre golpes de abanico una vecina del barrio de la zona sur de Murcia.

En la iglesia de Santiago el Mayor, vivas y gritos de «guapa» para la Fuensanta.

«Hace 'mucha' calor y hay mucha gente», se queja entre golpes de abanico una vecina del barrio de la zona sur de Murcia.

En la iglesia de Santiago el Mayor, vivas y gritos de «guapa» para la Fuensanta.

La Morenica avanza hacia el antiguo paso a nivel de Santiago el Mayor, arropada por unos romeros que caminan a buen paso antes de que apriete el calor.

Con las mochilas que regala hoy LA VERDAD al hombro, Mari Carmen Guillermo, Marisa Gómez y Pepi Navarro.

Miles de romeros han acompañado a la Virgen en su salida de la Catedral al inicio de la Romería

Foto: José Luis Ros Caval / AGM

Tres agentes de la Unidad de Caballería observan que la Romería transcurre en estos momentos con total normalidad.

Castillo de fuegos artificiales antes de embocar Torre de Romo.

La Fuensanta recibe una petalada desde el balcón de la Archicofradía de la Sangre.

Aplauso cerrado del público tras los vivas continuos. La comitiva reanuda la marcha.

La Fuensanta, parada en solemne saludo ante la puerta principal de la iglesia del Carmen. Centenares de romeros y curiosos se asoman sobre la valla del jardín Floridablanca.

Jesús, ataviado de huertano, lleva más de 20 años sin faltar a su cita con la Morenica.

Fuerte repique de campanas en una expectante iglesia del Carmen, que espera la llegada de la Fuensanta. Sin duda, uno de los encuentros más emocionantes de la Romería, que los peregrinos aguardan frente al jardín de Floridablanca.

Sobrevuela el cielo carmelitano el helicóptero de la Policía Nacional. Los peregrinos dejan de mirar hacia delante, por unos segundos, para hacerlo hacia arriba.

Los romeros entran en el barrio del Carmen

«No sé si este puente aguantará tanto peso», comenta en voz alta un romero, mientras cruza el Puente Viejo para esperar a la Fuensanta al otro lado del río, ya en el barrio del Carmen.

La Morenica deja atrás las inmediaciones del Ayuntamiento de Murcia y enfila ya su paso al Puente de los Peligros, una de las estaciones más especiales de la subida al Santuario.

Flores y piropos para la Fuensanta en su entrada a la Glorieta de España.

El obispo, José Manuel Lorca Planes, durante la misa, ha informado de que la previsión de romeros este año es mayor que nunca: unos 800.000

Embudo inevitable en la calle Arenal. No hay empujones y el ritmo es lento y tranquilo. Los romeros que inician la marcha descalzos, para cumplir sus promesas a la Patrona, se cuidan de posibles pisotones.

Sale la Patrona de la Catedral ante los aplausos y los vítores de los romeros. La fachada luce imperial con las primeras luces del día tras las últimas labores de rehabilitación. El año pasado, los andamios que cubrían el imafronte imposibilitaron la salida de la Fuensanta por la puerta principal del templo, y fue la plaza de la Cruz el punto de partida de la Romería 2024.