Toni Moral, del césped al metaverso
El exjugador del Efesé presenta en El Batel una colección de 38 cromos digitales; el catalán cambió las botas de fútbol por un sector que cada día toma más fuerza
Con el pelo más corto y algo más canoso, exactamente igual de delgado que cuando corría la banda del Cartagonova y convertido en todo un experto del metaverso, Toni Moral (Terrassa, 40 años) anda estos días por Cartagena como uno de los 20 creadores que se dan cita en la BWT Expo NFT, una muestra que se está llevando a cabo en El Batel.
Ahí, el exalbinegro, que acudió en condición de embajador de BELOBABA (uno de los patrocinadores de BWT), presenta 'KHAN', una colección de 38 cromos virtuales creados por el que fuera futbolista del Efesé durante dos años, desde el 2010 hasta el 2012, y por una inteligencia artificial.
Ya el balompié es pasado para un tipo que ha cambiado la equipación corta por los vaqueros y la camisa. Moral montó una plataforma para vender activos digitales y ahora profundiza en un mundo que «es el futuro» y en el que «quedan muchas cosas por hacer», apunta a LA VERDAD.
Sobre Paco Gómez: «Recuerdo que una vez nos dijo que nos cortáramos las uñas y las guardó en una bolsa»
«Comencé a trastear con NFTs (bienes, o 'tokens', no fungibles, exclusivos) en el 2014. Hice cromos de futbolistas para probar. Dos años después, decidí comenzar mi proyecto personal, llamado Watafan, una plataforma pionera en España. Cuando empecé, la gente me decía que nadie iba a pagar por un activo digital, pero yo fui testarudo y seguí adelante», explica Moral. Hace unos meses se llegaron a pagar 260.000 euros por el dibujo de una roca. Y se han desembolsado más de 10.000 euros por una parcela de terreno en el metaverso.
«Desconectado»
Está metido de lleno Toni Moral en esta aventura. Ya no habla tanto de fueras de juego, pero es capaz de hacer una larga exposición sobre la tecnología 'Blockchain'. «Mi único contacto con el fútbol a día de hoy es cuando juego con los veteranos del Real Madrid. Estoy bastante desconectado», confiesa el exjugador, que no olvida su etapa en Cartagena.
«Volver a esta ciudad me hace especial ilusión porque, por ejemplo, mi hija nació aquí. Hacía tiempo que no venía y lo cierto es que me apetecía mucho», dice el extremo, que vistió la casaca albinegra en 70 ocasiones, 33 de ellas la temporada donde el proyecto cartagenerista se fue a pique y regresó a la Segunda división B.
Lo cierto es que Toni Moral fue de lo poco potable en un año nefasto, hasta vergonzoso. «Cuando todo funciona tan mal es difícil que algún jugador se salve. Lo único que nos quedaba era echarle huevos, porque jugábamos mal. En los vídeos me veía y yo solo corría como loco. Me preguntaba a mí mismo qué hacía», recuerda el de Terrasa.
«Esa temporada no nos acoplamos ni nos entendíamos. Nunca hubiera imaginado que ese año iba a terminar así porque se hizo muy buen equipo, a golpe de talonario. Para mí fue un varapalo deportivo y económico porque después de terminar en el Cartagena me quedé sin equipo un tiempo. Fue una época muy dura», relata a renglón seguido.
La brujería no funcionó
Inolvidable para él también fue Paco Gómez, excéntrico presidente de la entidad por aquel entonces. Hace cinco años, Moral aseguró en una entrevista que el mandatario les tomaba muestras de pelo para hacer brujería. «Recuerdo que una vez nos cortamos las uñas y las guardó en una bolsa», desvela ahora. «Era el jefe y hacíamos lo que nos decía. Pero la brujería tampoco funcionó. Son anécdotas que te tienes que tomar con humor», explica alguien que aterrizó en el Efesé porque era el equipo que «mejor fútbol hacía» de toda la Segunda división. «No he sido de ver partidos y con el Cartagena disfrutaba», termina.
