Los talleres de chapa denuncian pérdidas de 40 millones al año por la presión de los seguros
Grematur alerta de ajustes del 30% sobre el coste real de las reparaciones, que ponen contra las cuerdas al sector regional al hundir su rentabilidad
La estrategia que desarrollan las compañías aseguradoras para imponer sus criterios de costes a los talleres de chapa y pintura, sin tener en cuenta ... la valoración real del servicio de reparación, tiene a este subsector de la automoción en una situación límite en la Región de Murcia. Denuncian una presión que alcanza un ajuste del 30% en los precios, lo que en función del volumen de negocio que representan los seguros en su actividad genera unas pérdidas económicas que rondan los 40 millones de euros anuales para el conjunto de los 450 establecimientos existentes en la Comunidad.
Estas son las cifras del impacto efectivo que maneja el Gremio de Talleres de Reparación de Automóviles de la Región de Murcia (Gretamur), cuyo presidente, José de la Cruz López, subraya que se trata de unos números «muy importantes, cuya estimación se hace en función del promedio de facturación de 78.000 euros por operario al año que se contabiliza a través de las aseguradoras». Hay que tener en cuenta que el número de trabajadores en este sector se sitúa en torno a 1.800 profesionales, por lo que el montante dependiente del mercado de estas compañías llegaría a los 132 millones de euros, al representar una cuota entre el 60% y 70%. Y de ahí se extrae la merma económica referida de un tercio sobre esa cuantía global.
CIFRAS
90% de todas las operaciones de chapa y pintura
están cubiertas por pólizas de seguros.
1.800 trabajadores
desarrollan su labor profesional en los talleres de chapa de la Región.
Porque como hacen hincapié los pequeños empresarios y autónomos del sector, muchas compañías ajustan al máximo el precio-hora del taller, sin negociación alguna y sin tener en cuenta la inflación y los costes. Asimismo, en numerosos casos determinan unilateralmente el tipo de recambio que debe ser utilizado sin dar opción de elegir. Todo ello dentro de un contexto en el que los talleres se han convertido en proveedores de las aseguradoras y se ha perdido de vista que el cliente no es el taller sino el asegurado. Una situación que es generalizada en España y en otros países de la UE.
Una situación que va a peor
De hecho, la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (Fremm), en la que se integra Gretamur, junto al resto de organizaciones empresariales del sector nacional de vendedores y reparación de vehículos (Conepa, Fagenauto, Ganvam, Cetraa) han llevado hasta al Parlamento Europeo su denuncia contra esas «malas prácticas», tal como publicó LA VERDAD en su edición digital el pasado 12 de abril.
Y es que pese a los esfuerzos que desde hace años se hacen en todo el sector, la realidad es que la situación con las compañías de seguro no solo no mejoran sino que, por el contrario, han ido a peor. Incluso, sostienen que más allá de no respetar el precio de mano de obra expuesto al público por el taller y los tiempos de reparación, así como imponer un listado selectivo de proveedores, también reedirecionan a los clientes a determinados talleres en función de sus intereses.
«Nos obligan a negociar con el cliente para ponerle determinadas piezas que las compañías quieren», indica José de la Cruz
En suma, les acusan de «un abuso de posición dominante» que conduce a una especie de subasta a la baja de los talleres para poder hacerse con los servicios. De modo que las compañías «abandonan el carácter indemnizatorio que la legislación les atribuye para con sus asegurados en virtud de la póliza suscrita, para pasar a ser un prestador de servicios de reparación para estos mismos, con independencia de quién sea el causante de los daños en los vehículos».
«Las aseguradoras pagan de media 34,6 euros de media al taller multimarca de carrocería, cuando deberían facturar 46 euros para sobrevivir», señala José de la Cruz López, por lo que pierden cifras millonarias.
Igualmente, mantienen desde el sector de talleres que las compañías instan muchas veces a la reparación cuando lo aconsejable, en términos de seguridad vial, es la sustitución de la pieza dañada. Además de fijar todo tipo de mecanismos para imponer su valoración del coste de la reparación, como la contratación de peritos no independientes o la utilización de baremos que son un traje a medida elaborado por las propias aseguradoras.
Ante estas denuncias, la patronal española de las aseguradoras, Unespa, ha optado hasta ahora por no hacer valoraciones, limitándose a responder que es cada compañía la que se encarga de gestiona de forma individualizada sus relaciones con sus propios proveedores y prestadores de servicios.
Afecta al consumidor
«Nos obligan a veces a negociar con el cliente para ponerle determinadas piezas que ellos quieren. Y aunque hay muchos talleres que no admiten esa exigencias, en otros casos tratan de forzarles a reparar como no debieran, cuando además la garantía la tiene que dar el taller, no la compañía de seguros», señala el presidente de Gretamur. Pero al final esa presión afecta, por consiguiente, al consumidor.
Por ultimo, desde Fremm también han intensificado la labor de asesoramiento e información a los talleres, de cara a seguir divulgando las herramientas ya puestas en marcha para reclamar ante las aseguradoras y poner en marcha nuevas líneas de trabajo con el fin de denunciar este tipo de prácticas.
-
Fremm impulsa la formación de técnicos en vehículos eléctricos
Los profesionales y empresarios de automoción de la Región de Murcia serán, por otro lado, los primeros en avanzar en la formación de profesionales para la reparación y mantenimiento de los vehículos eléctricos e híbridos. Todo ello gracias a la participación de la patronal regional del metal dentro del proyecto europeo Evtech, cuya meta es contribuir al desarrollo de la oferta formativa en el sector emergente de los nuevos vehículos eléctricos e híbridos. Su primera actividad se desarrollará mañana, 30 de abril, de 9 a 12 horas, en el salón de actos de Fremm. Un seminario, germen de un futuro curso formativo, que analizará los aspectos generales de los vehículos eléctricos y sus principios eléctricos y electrónicos.
-
«Lo mejor es que estemos unidosy hacer fuerza para defendernos»
«Aprietan mucho la aseguradoras en el final de la factura, y con los recambios también nos descuentan mucho para poder trabajar con ellas, incluso hay casos en los que te organizan todo el material», afirma Juanfran Aledo, al frente de dos talleres de chapa y pintura en Alhama de Murcia y Librilla. Un joven emprendedor hecho a sí mismo en el sector desde que con 17 años, tras sacarse la ESO, se formó como mecánico de carrocerías y comenzó sus primeros pasos en la profesión.
En su opinión, «lo mejor que podemos hacer los talleres es estar unidos y hacer fuerza juntos defendiéndonos ante esas grandes empresas para poder tener un poco de margen; porque si ante la presión cada negocio afloja, y uno dice que pone la mano de obra a 30 euros, el otro a 29, y así cada cual, al final es que no hay ningún beneficio ante reparaciones que van tan ajustadas».
En el caso de los talleres de JF Aledo -denominación comercial-, aunque mantienen también una cuota de actividad a través de las aseguradoras que puede ronda el 70%, sin embargo «trabajamos también directamente al público, ya que nuestra zona funciona bastante bien, aunque claro que, en general, se funciona más con la aseguradoras». De ahí que «como decía anteriormente si hiciéramos más piñas podríamos sacar más cosas», añade.
Para este profesional chapista, de 40 años, peor aún es «el trabajo para las plataformas de 'renting' que es un terreno superquemado». Tampoco se olvida Juanfran Aledo de advertir sobre otra problemática importante a la que se enfrentan los talleres como es la falta de mano de obra cualificada. «Cada vez nos cuesta más encontrar trabajadores, gente que sepa del oficio.
Falta personal
De hecho, vemos que muchos profesionales se jubilan y se cierran talleres», subraya. Y, al mismo tiempo, «cuesta que la gente joven emprenda y tire adelante, por todo el tema de los gastos, de impuestos. Así que está todo complicados», concluye.
La plantilla de FJ Aledo está conformada por 11 personas entre los dos talleres. La mayor estructura se encuentra en las instalaciones de Alhama, abiertas en 2015; a las que se sumaron el pasado año las de Librilla.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión