Croem ve positiva pero «discreta» la evolución del mercado laboral de la Región hasta junio
La patronal destaca el alto ritmo de crecimiento del sector Servicios en el primer semestre del año, superior al nacional aunque más moderado que el de la anualidad anterior
EUROPA PRESS
Viernes, 4 de agosto 2023, 13:02
La Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de Murcia (Croem) valoró la revisión al alza del Producto Interior Bruto (PIB) de la Región de Murcia, que podría crecer más del 1,5% en 2023, según aparece recogido en el boletín de coyuntura económica de la patronal relativo al segundo trimestre del año.
Así, la Confederación constató una favorable evolución coyuntural en el segundo trimestre de forma que, entre abril y junio, el PIB murciano avanzó un 1,6% anual, tasa consistente y similar a la nacional (1,8%), que tiene traslado a las previsiones de crecimiento económico para el conjunto del año.
De hecho, la resiliencia endógena de la economía regional permite revisar al alza la previsión de crecimiento del PIB en todo 2023, que según el consenso de las estimaciones más recientes se situaría ya por encima del 1,5%, tal y como corroboró la patronal murciana.
Un porcentaje superior al que se pronosticaba en el primer trimestre del año (ligeramente superior al 1%) o a finales del año pasado (cuando no se alcanzaba la unidad).
Diferencias por sectores
Ahora bien, Croem puntualizó que la realidad de los sectores económicos es muy diferenciada, de forma que, en el agrícola, las abundantes lluvias no han mejorado sustancialmente la disponibilidad de recursos, y además, el carácter torrencial que ha caracterizado algunos episodios ha afectado gravemente a multitud de cultivos en ciertas comarcas.
Por su parte, la industria murciana no varía en los últimos meses la dinámica contractiva del primer trimestre y registra el peor desempeño de las distintas comunidades autónomas, lastrada por las ramas energéticas y químicas.
Mientras tanto, en el sector de la Construcción predomina la estabilidad, aunque comienzan a apreciarse algunos síntomas de desaceleración, que se manifiestan principalmente en descensos de la obra pública (tras sus niveles extraordinarios de anualidades anteriores) y de la compraventa de viviendas.
Y, finalmente, el sector Servicios mantiene un alto ritmo de crecimiento en el primer semestre del año, superior al nacional aunque más moderado que el de la anualidad anterior, que se sustenta en la buena marcha de comercio, turismo y transporte.
Evolución del mercado laboral
Respecto al mercado laboral, Croem destacó que registró una dinámica positiva en el segundo trimestre de 2023, con un aumento de la ocupación (+15.300) y una reducción del desempleo (-7.500) que, no obstante, resultaron más discretos que sus correlativos nacionales.
Y, si se amplía el análisis a términos anuales, la patronal cree que «no se puede obviar la importante moderación de los registros, con un aumento de desempleados (+2.300) y cierta debilidad en el aumento de la ocupación (5.800)».
La tasa de paro, a pesar de reducirse 1,1 puntos respecto al trimestre anterior, hasta el 12,4%, se mantiene por encima de la nacional (11,6%).
Por su lado, la inflación de la Región de Murcia profundizó en la senda de moderación que venía mostrando desde finales de la anualidad anterior, favorecida por un efecto de base, que situó la variación interanual del IPC en el 1,8% en junio, la cifra más baja desde marzo de 2021.
Por otra parte, las ventas exteriores de la Región de Murcia sobrepasaron los 6.100 millones de euros hasta mayo, aumentando un 5,1% anual si se excluyen los productos energéticos.
En este sentido, la Croem advirtió de que la Comunidad Autónoma no parece reconducir sus elevados niveles de déficit público en los primeros compases de 2023, pues alcanzaba el -0,7% del PIB en abril, más del doble del objetivo establecido para el conjunto del año (-0,3%).
«En el lado positivo, se reducen la deuda comercial con proveedores (53,4 millones) y el plazo medio de pago (54 días), aunque este último es todavía el más alto de las distintas comunidades», ha puntualizado.
Evitar que la incertidumbre afecte a la economía
En base a todo ello, la Croem consideró que la economía regional ofreció «sensaciones encontradas» en el segundo trimestre de 2023.
Así, en el lado «positivo», Croem destaca la resiliencia que están mostrando tanto la Región como España. «En particular, se mantiene todavía un crecimiento consistente de la actividad, en la que quizás pesa sobremanera la inercia reciente de recuperación», añadió.
En el lado «negativo», la patronal recordó que, si bien desde hace algunos trimestres se venían percibiendo síntomas de agotamiento del ciclo expansivo, «estos se han hecho aún más evidentes entre los meses de abril y junio».
Así se pone de manifiesto en la desaceleración que viene experimentando el mercado laboral, cuyo ritmo de creación de empleo es sustancialmente inferior al de las anualidades prepandemia. Igualmente, comienzan a identificarse serias debilidades en ciertos sectores, según el boletín de coyuntura de Croem.
La producción industrial ha virado a negativo --con una proporción no pequeña de ramas de actividad en contracción-- y en Construcción, aunque se atisba una cierta estabilización, «se podrían encender las alarmas si se prolongan las caídas en las compraventas y en el número de viviendas iniciadas, dado que no existe una cartera programada de inversión pública que pudiera compensar una eventual desaceleración de la variante residencial», tal y como alerta la patronal.
Por otra parte, Croem advirtió de que «tampoco ha ayudado la aparición de algunos fenómenos meteorológicos adversos, que han afectado enormemente a algunas cosechas en las que la Región de Murcia tiene una marcada especialización, agravando aún más los problemas estructurales que ya arrastraba la Agricultura».
Admitió que la fortaleza del sector Servicios ha permitido contrarrestar la situación hasta el momento, particularmente por la pujanza de la actividad turística, que mantiene altas tasas de crecimiento y se encuentra ya cerca de recuperar los niveles de 2019, cuando logró sus mejores registros históricos.
Sin embargo, CROEM puntualizó que «hay más dudas que certezas sobre el lapso temporal durante el que este frágil equilibrio podrá seguir sosteniendo el ciclo de crecimiento», sobre todo, «porque los riesgos se mantienen al alza».
«En efecto, la coyuntura internacional no invita precisamente al optimismo», según la Croem. En primer lugar, señaló que el impacto económico de la invasión rusa de Ucrania «sigue siendo evidente en las cadenas globales de suministro, sobre todo en las de materias primas, sin que se vislumbre un fin próximo del conflicto».
En segundo lugar, aunque las tensiones inflacionistas parecen remitir ligeramente, «los principales bancos centrales han continuado endureciendo las políticas monetarias, lo que indudablemente elevará los costes de financiación», matizó.
Y en tercer lugar, señaló que «el estancamiento de algunas grandes economías de la Unión Europea --principal destino de los bienes murcianos-- podría incidir en la capacidad exportadora».
«A este ya de por sí difícil escenario se ha venido a sumar una creciente incertidumbre política tras los resultados de las recientes citas electorales», según Croem, que señala que, una vez constatadas las «dificultades para desarrollar un proceso de diálogo amplio dentro del constitucionalismo, se podría comprometer la estabilidad que requiere la actividad económica y propiciar derivaciones inquietantes, tanto en la variante nacional como regional».
Por ello, considera «imprescindible» apelar a la responsabilidad de las diferentes formaciones políticas «para que se alcancen acuerdos pensando única y exclusivamente en el interés general y no en el partidista».
