El último tren para Superlópez pasa por Budapest
En su séptimo Mundial, Miguel Ángel López buscará mañana una medalla en los 35 km marcha, animado por su oro en Múnich 2022
El murciano Miguel Ángel López, campeón del mundo y de Europa de los 20 kilómetros marcha hace casi una década, renació el verano pasado en Múnich, cuando se proclamó otra vez campeón de Europa, en esta ocasión en los 35 kilómetros. El de Llano de Brujas ya no esperaba algo así. Fue un premio con el que no contaba un marchador que desde su fracaso en los Juegos de Río 2016 no había levantado cabeza.
«Hasta el propio Miguel Ángel dudaba de sí mismo. He tenido que estar muy encima de él, apoyarle, apoyarle y apoyarle. Siempre he dicho que es el mejor del mundo y que volvería a demostrarlo. Pero todo este tiempo hubo gente, mucha gente, que me decía: 'Carrillo, déjalo, Miguel está acabado. No te canses'», contaba su inseparable José Antonio Carrillo tras el éxito de su pupilo en la ciudad germana hace un año.
El entrenador ciezano, que mañana volverá a estar a su lado en la final de los 35 kilómetros del Mundial de Budapest (a partir de las 7.00 horas), siempre creyó en que Superlópez resurgiría de sus cenizas. «La de Río fue una derrota tan dolorosa que le persiguió durante varios años. En su situación quizá otro lo habría dejado, pero Miguel tiene mucha fuerza de voluntad y la medalla de oro de 2022 fue un regalo para él», confiesa Carrillo.
Miguel Ángel López ahora está en paz consigo mismo. El oro continental de 2022 le reconciclió con la marcha y mañana saldrá a competir en su séptimo Mundial sin ningún tipo de presión. A sus 35 años, no obstante, no se conforma con el bronce. «Soy un inconformista y quiero luchar por el oro», admitió hace unas semanas el veterano marchador a 'ABC'.
París y la retirada
Serán sus últimos Mundiales, pero aún tiene cuerda para seguir machacándose un año más y pelear por una medalla olímpica en los Juegos de París de 2024. «Me veo en los Juegos de París, pero no en los siguientes. Me queda poco en la élite y estoy estudiando Ciencias del Deporte. Igual me dedico a la docencia o soy entrenador de atletismo», cuenta el deportista de Llano de Brujas.
A Superlópez le preocupa el futuro de la marcha. «Yo soy un romántico de la marcha y no me ha gustado nada que hayan desaparecido los 50 kilómetros, una prueba mítica. Y después, pues tampoco me ha gustado que quiten los 35 kilómetros del programa olímpico. Todo ha sucedido sin grandes explicaciones y nos tenemos que adaptar a lo que va decidiendo otra gente. En mi caso, me tendré que adaptar otra vez a los 20 kilómetros», dice el murciano.