Francisco Cortés: «Sabía que íbamos a ganar al Inter, lo ves en las miradas y en el ambiente»
Con dos asistencias y un gol fuerza el tercer partido de cuartos de final de este miércoles y mantiene vivo el sueño de revalidar el título logrado hace un año
El Francisco Cortés de 2017 jamás se hubiera imaginado en Primera División, levantando títulos, vistiendo la camiseta de la selección española y escuchando el himno ... de la Champions en el pabellón Antares de Le Mans. Tampoco siendo fundamental en el intento de reconquista del título de Liga para el Jimbee Cartagena, con un gol y dos asistencias frente al Movistar Inter que dejan la eliminatoria de cuartos de final totalmente abierta para mañana (Pabellón Jorge Garbajosa, 20.00 horas). Hace ocho años, sin apenas cobrar ni cotizar, estuvo a punto de dejar el fútbol sala para aceptar un empleo en el supermercado Carrefour. Afortunadamente resistió, tomó la decisión acertada y hoy en día, a sus 29 años, el ala almeriens es uno de los jugadores más determinantes del 40x20, vive de este deporte y cada día en el Palacio de los Deportes es un sueño hecho realidad. «Nunca olvides tus raíces ni a tu gente. El orgullo de tu pueblo», reza un mensaje en su taquilla del vestuario.
–Sacaron adelante el partido del domingo. Era vida o muerte y remontaron en cuatro minutos el 1-2 en contra.
–El Movistar Inter nos metió seis goles solo unos días antes en Torrejón de Ardoz. Éramos conscientes de que para forzar el tercer partido, para no irnos de vacaciones, teníamos que darlo todo. Lo hicimos muy bien, solventamos los problemas que fueron surgiendo durante el encuentro y todo nos salió de cara. La presión siempre está, más en nosotros que tenemos que ganar lo máximo posible, pero la clave es que fuimos conscientes de que eran cuarenta minutos a cara o cruz. Lo dimos todo y lo conseguimos. Gracias a Dios salió bien y a ver si podemos ganar estemiércoles.
–Dio dos asistencias y marcó un gol, el del 2-2, totalmente determinantes.
–Sabía que íbamos a ganar. Son cosas que sientes, que ves en las caras y en los ojos. Yo me fijo mucho en las miradas. Estábamos muy concentrados y eso se nota: las ganas, la presión, la ambición, las ganas de ganar... Le ganamos al Movistar Inter porque lo teníamos claro, por creer.
«Somos un grupo increíble y eso es lo que lleva al éxito en el deporte»
–¿Fue su mejor partido desde que llegó?
–Sí. Creo que sí porque ayudé al equipo a meter los tres goles, me sentí muy bien sobre la pista. Como soy yo realmente sobre la pista: me sentí importante, sentí que por estos momentos me ficharon. A nivel de protagonismo, de ir a por todas, de darlo todo, fue de los más completos.
–¿Cuál va a ser la clave para ganar mañana?
–Somos doce jugadores de pista, puede jugar cualquiera y esa capacidad de rotar y de estar unidos nos refuerza como equipo. Vamos con muchas ganas e ilusión. La única clave es querer como quisimos el domingo. El Movistar Inter nos marcó el 1-2 y es que el equipo quería, no se rendía. Y las cosas llegan cuando crees. Tenemos un nivel de concentración muy alto. Lo percibo en el día a día.
–Se escaparon partidos claves en la Copa del Rey, la Copa de España y la semifinal de la Champions. Es ahora o nunca.
–Exacto. Salimos con ese pensamiento, de que era el último partido y lo teníamos que dar todo. Así lo debemos hacer mañana en Torrejón. Creo realmente en las posibilidades de este equipo. Somos un grupo increíble y eso es lo que de normal te lleva al éxito en el deporte.
–¿Quién le ha sorprendido dentro del vestuario?
–En todos los entrenamientos veo detalles que me sorprenden. Los detalles de calidad. La pegada de Motta, las definiciones de Pablo Ramírez, los controles de Waltinho, los pases de Darío Gil, la rapidez de Gon Castejón y qué decir de Mellado, que ya me enamoraba antes de venir aquí y esta temporada jugando con él para qué decir. Es que son todos. Aquí cuando no aparece uno aparece otro. Me siento muy cómodo y feliz aquí. Creo que se pudo ver en la celebración del título de la Supercopa: me dejé hacer de todo y me raparon la cabeza. Si ganamos cualquier otro título me da igual lo que me hagan.
«Estaba en Segunda B y casi dejo el fútbol sala porque me llamaron del Carrefour»
–¿Qué le ha aportado Duda que le faltaba anteriormente?
–El trabajo. Las ganas de ganar. Creo que es una pieza fundamental dentro de su faceta como entrenador: que es un ganador y así lo transmite al jugador. Un tío muy competitivo, que te lleva a darlo todo al máximo. Yo ya lo veía cuando era pequeño. Como ahora, Duda era un emblema para el vestuario. Estar con él es una pasada.
–¿Cómo fueron sus inicios en el fútbol sala?
–De niño estuve unos años en el fútbol sala, pero yo era de fútbol, de fútbol once. Jugaba de mediapunta en las categorías inferiores del Poli Ejido y del Almería, entre otros equipos de la zona. Me gustaba organizar el juego. Ya era sénior cuando jugada en Tercera División con el Huércal de Almería, descendimos a Preferente y decidí dejarlo. Tenía ya 21 años, acaba de conocer a mi mujer y era el momento. Un antiguo entrenador mío de crío, en el fútbol sala y que vino a verme el domingo, me animó a engancharme otra vez al 40x20. Era para echar el rato pero me vinieron las ganas de competir. En tres años me fichó El Ejido de Segunda B y luego casi subimos a Primera. De ahí, ya al Manzanares.
Noticia relacionada
Más de cien aficionados del Jimbee Cartagena estarán mañana en Torrejón de Ardoz
–Fue todo muy rápido.
–Sí. Le doy las gracias a Francisco Cano por reengancharme y hacerme querer competir otra vez. Cuando estaba en El Ejido, en Segunda B, casi lo vuelvo a dejar. Ya tenía 24 años, cobraba muy poco, no estaba dado de alta, no era vida. Hice un curso de cajero y luego me llamaron para trabajar en el Carrefour. Me iban a hacer un contrato largo y mi madre me dijo que me animara. Era el momento de sentar la cabeza y trabajar. Siempre le hago caso a mi madre, porque como todas las madres quieren lo mejor para sus hijos, pero esa vez decidí por mí. Le dije que no quería dejar el fútbol sala, que iba a centrarme en esto porque lo iba a conseguir. He cumplido un sueño.
–¿Tenía alguna referencia familiar en el deporte?
–Nunca. Siempre he estado con un balón y jugando en equipos porque me gustaba. Mi padre es albañil y mi madre ayuda a domicilio. Somos una familia humilde. La vida da muchas vueltas y yo siempre digo que el que me reinició a jugar en Tercera de fútbol sala fue Francisco Cano.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.