Nizzolo gana la Clásica de Almería y Valverde inicia el año de su adiós

Camino de la meta en Roquetas de Mar. A un lado, los flamencos rosados planeando sobre la marisma. Al otro, el mar de plástico que cubre los invernaderos. Y al fondo, tras rotodas y algún estrechamiento, ondea la pacarta final. El equipo Deceunink ha perdido por caída a Hodeg y por avería a Cavendisch, así que tira de Senechal en el sprint. Pero no puede con uno de los favoritos, el italiano Giacomo Nizzolo, campeón de Europa, que gana con claridad la Clásica de Almería por delante de Senechal, Laas y Jon Aberasturi.

Para buena parte del pelotón, la prueba andaluza es la primera del año. También para Alejandro Valderde. Para el murciano es algo más: será su última presencia en esta carrera. Ha cumplido 40 años y todos sus sueños ciclistas. Es la temporada de su despedida. A cada carrera a la que vaya le dirá adiós. También, claro, fue el bautizo de muchos debutantes, como Mikel Azparren, que tiene 21 años y apenas sabía andar cuando Valverde debutó en la Clásica de Almería, en 2002.

Los 183 kilómetros de la prueba corrieron entre dos mares, el Mediterráneo y el de plástico. Hubo fugas, como la de Maté (premio de la montaña) y Lazkano al principio, y como la de Ibon Ruiz y Madrazo al final. Pero todos sabían que Almería es coto para velocistas. Hubo también caídas. Siempre las hay en esta clásica invernal. Y hubo, por supuesto, vértigo en el acceso a Roquetas de Mar. La nómima de velocistas era enorme, con Gaviria como referencia. Todos vienen de la pretemporada. Llenos de ambición. Pero solo gana uno y fue Nizzolo. Mientras lo celebraba, Valverde, que entró a once segundos y fue el 55 en la general, saludaba. Primer adiós de su ultimo año. El muleño Luis León, por su parte, acabó en el puesto 41.