El Cebé solo resiste dos asaltos en el WiZink y sigue sin ganar a domicilio
Los albinegros sufren la quinta derrota en ocho jornadas y afrontan el parón de la competición en puestos de descenso a Segunda FEB
El Odilo FC Cartagena ocupa puestos de descenso a Segunda FEB porque hasta el momento ha sido incapaz de competir durante cuarenta minutos fuera de casa. El equipo entrenado por Jordi Juste sigue con la cuenta a cero a domicilio y anoche, en el glamuroso WiKink Center de Madrid, encajó la quinta derrota en ocho jornadas frente al poderoso Movistar Estudiantes (91-68).
Esa imagen lejos del Palacio de los Deportes es principalmente lo que arrastra al Cebé a marcharse al parón en puestos de descenso. El equipo perdió en Ourense de 28 puntos (101-73), en Zamora de 11 (94-83), en Sevilla de 16 (82-66) y anoche en Madrid de 23 (91-68). Salvo en la cita frente al Betis, donde solo se resbaló en los siete minutos finales, los albinegros han caído con merecimiento y por más de 90 puntos en contra.
Movistar Estudiantes
Granger (3), Schmidt (11), Garino (7), Andrić (12) y Kravić (16) -quinteto inicial- Díaz (8), Sola (-), Alonso (12), Giovannetti (7), Rubio (3), Alderete (-) y Barro (12).
91
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68
Odilo FC Cartagena CB
Jordá (12), Hermanson (16), Blat (4), Van Eick (11) y Ugochukwu (6) -quinteto inicial- Martín (-), Cabrera (-), Gil (5), Garuba (6), Asier González (8) y Smallwood (-).
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Parciales: 22-16, 18-18 (40-34), 24-16 (64-50) y 27-18 (91-68).
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Árbitros: Morales Ruiz, Murillo Khon y López Lecuona.
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Incidencias Jornada 8 de la Primera FEB disputada en el WiZink Center de Madrid ante 7.012 espectadores.
Precisamente ese balance coloca al equipo de Jordi Juste como el tercero que más puntos en contra recibe (675), solo por debajo del Tizona Burgos (725) y el Castellón (720). Minimizar esa estadística y encontrar un equilibrio será básico de ahora en adelante para sumar victorias y huir de los tres puestos de descenso a Segunda FEB. Quedó demostrado anoche en el WiZink, en un nuevo ejercicio a domicilio donde los de Jordi Juste no pudieron aguantar la tensión competitiva más allá de dos asaltos.
Vivo al descanso
El equipo se marchó al descanso con un marcador accesible, abierto y con opciones de seguir compitiendo (40-34), sabiendo de igual manera que el Movistar Estudiantes es un gigante dormido del baloncesto español que por accidente sigue fuera de la élite de este deporte. Su hogar, el fabuloso WiZkink Center, su modélico proyecto y su masa social, ayer con siete mil personas, así lo demuestran.
Los colegiales pasaron el rodillo para colocarse colíderes de la categoría con siete victorias en las ocho primeras jornadas, del mismo modo que la semana anterior lo hizo el Palencia en Cartagena (67-100). La diferencia es que esta vez hubo partido durante algo más de dos asaltos, el tiempo que aguantó el Cebé con un marcador igualado y a una distancia moderada de seguir con vida.
El equipo jugará otra vez el día 1, de nuevo fuera de casa, para medirse al líder de la categoría: el Flexicar Fuenlabrada
Todo se acabó entrado el tercer cuarto, cuando las diferencias empezaron a pasar de los diez puntos. Al equipo de Jordi Juste le penalizó y mucho la falta de acierto en el lanzamiento exterior. Los albinegros enderezaron solo 9 de sus 33 lanzamientos de triples, el 27%, siendo Alberta Cabrera uno de los destacados, al quedarse seco en todos los intentos. Tampoco anotaron puntos Alberto Martín y Smallwood, además de un Jordan Rogers que siguió sin contabilizar minutos.
La competición se detiene esta semana y el Cebé no volverá a competir hasta el domingo 1 de diciembre, a las 19.30 horas, cuando le toque jugar de nuevo a domicilio en el Fernando Martín y frente al líder: el Fuenlabrada. Desde luego, un calendario nada benévolo.
