Víctor González: «El nuevo montaje de 'Priscilla' es un proyecto con más corazón»

-¿Cómo llega a su carrera el musical de 'Priscilla'?

-Hace diez años ya hice con SOM otra versión de 'Priscilla'. La temporada pasada yo estaba haciendo con ellos 'Chicago' y salieron las audiciones para 'Priscilla'. Todos los que hemos trabajado ya en este musical guardamos un buen recuerdo así que solicité hacer las audiciones para este personaje y, después de un duro proceso de selección, tuve la suerte de poder interpretarlo.

-¿Qué cambios ha notado en esta versión de 'Priscilla' respecto al montaje de hace diez años en el que también participó?

-La gran diferencia con el montaje de ahora es que este tiene un sello de aquí, es su producto nacional. La dirección es de Pepe Ocio y, sinceramente, siento que es un proyecto con un poco más de corazón. Está actualizado, está visto desde un prisma más social y personal, se han adaptado algunos chistes que, evidentemente, hace diez años eran aceptables y ahora se les ha pasado por la pátina de una sociedad mucho más abierta y mucho más inclusiva. Yo creo que tiene la misma diversión y el mismo impacto a nivel musical y visual y está hecho con sensibilidad.

-¿Cómo se prepara para la gira de un exigente musical?

-Hay que prestarle atención al cuerpo, al descanso, a la hidratación. Hay que hacer ejercicio, llevar una buena alimentación y buscar un sitio en el que poder descansar bien, una buena cama. Hay que cuidarse mucho porque este es un musical, como casi todos, exigente a nivel vocal y a nivel físico, y queremos que el resultado sea óptimo.

-En el musical sonarán algunas de las canciones más bailadas de la historia.

-Es una de las suertes que tenemos con este musical, la banda sonora está en el ADN de todo aquel que se siente en el patio de butacas. Van a sonar en mi voz y en las voces de nuestros compañeros los temas más bailados del pop, del funky... Imagínate: Gloria Gaynor, Madonna, Elvis Presley... todo el mundo las conoce, da igual la edad. Empezar el musical cantando 'It's Raining Men' es un punto a nuestro favor. El musical se estrenó en 2006 y sigue funcionando y ejerciendo el mismo efecto en el público.

-¿Cómo es su personaje, Tick?

-Él tuvo una relación con una mujer cuando era joven y tuvieron un hijo. De esa semilla surge toda la historia. Así comienza un viaje que hacen para que Tick conozca a su hijo y se convierte en un viaje personal para los tres personajes principales [Tick, Bernadette y Adam]. Un viaje en el que descubren muchas más cosas de las que ellos pensaban. Un viaje de autoconocimiento en el que se forma una familia. Mi personaje es un hombre que se dedica al transformismo. Trabaja haciendo 'shows' por las noches y tiene esta historia personal con la que tiene que hacer las paces y abrazar la paternidad. Se rodea de sus mejores amigos para que le acompañen en este viaje y, supongo, que para darle fuerzas para todo a lo que se va a enfrentar, que para él es importante.

-¿Hay 'feeling' entre el elenco?

-Hemos tenido muchísima suerte porque en las últimas fases de las audiciones ya nos juntaron a todos y la verdad es que tanto con Daniel [Garod, que interpreta a Felicia], como con Cristóbal [Garrido, que interpreta a Bernadette] y con Esteban [Oliver, alternante de Bernadette] ya había un 'feeling' fantástico en las audiciones. Resulta fácil estar con ellos e interpretar a unos mejores amigos. Nos apoyamos los unos a los otros, nos miramos, nos lo pasamos bien. Cuando viene gente que nos conoce a vernos nos dice: «¡habéis creado una magia entre vosotros supercreíble!». Y pienso que esa magia existe realmente, nos ha resultado muy natural crear esa relación de amistad.

-Ha participado en espectaculares y exitosos musicales. ¿Con cuál se queda?

-'West Side Story' es una historia tan potente y tiene una música tan brutal... para mí fue un viaje precioso. Además, se terminó sin nosotros saberlo, porque llegó la pandemia. Hicimos nuestra última función en Santander sin saber que era la última. Lo siguiente que nos dijeron fue: «Chicos, no podemos hacer más funciones, lo retomaremos cuando esto se acabe» y nunca se pudo retomar. Creo que ese cierre fue un choque emocional que ha marcado ese proyecto como uno de los viajes más bonitos de mi vida. Yo interpretaba el papel de Riff, que transitaba mucho la guerra, la lucha entre las dos bandas, y, una vez cada 15 días interpretaba a Tony, que transitaba el amor. Poder tocar esos dos extremos en la misma función para mí fue una maravilla.

-¿Y cuál le gustaría hacer?

-Siempre lo digo, y ya me van cayendo los años y pienso «esto me va a quedar a mí muy mayor», pero mi sueño es hacer de Bert, el deshollinador de 'Mary Poppins'. ¡Como tarden mucho en traerlo voy a ser el padre de Bert! [bromea]. He visto el musical en Londres y es tan bonito... La película me tiene loco desde pequeño. Si se tiene la oportunidad, es muy recomendable el musical en Londres. Yo lo pude ver hace tres años y es que el papel de Bert, si te gusta bailar y cantar y eres actor, el número de los deshollinadores, en el que te cuelgan del techo y bailas cabeza abajo, es el sueño de cualquier actor de musical.