Mariángeles Cortés: «Es una ventana abierta a los tratamientos personalizados»
La investigadora de San Pedro del Pinatar es la única española ganadora de uno de los reconocimientos del Congreso Internacional de Alzhéimer y Párkinson
PILAR MARTÍNEZ MAÑOGIL
Murcia
Martes, 28 de diciembre 2021, 01:42
Tiene 27 años y ya lleva más de un lustro dedicándose a la investigación. Ahora, la bioquímica Mariángeles Cortés Gómez (San Pedro del Pinatar, 1994) ... ha recogido los primeros frutos de su esfuerzo gracias al prestigioso 'Congreso Internacional de Alzhéimer, Párkinson y otros trastornos patológicos' que se celebrará del 15 al 20 de marzo en Barcelona. Se trata de un reconocimiento que el comité científico del congreso otorga a 16 jóvenes investigadores y sus novedosos trabajos. El premio es la inscripción gratuita, una dotación económica de mil euros y la posibilidad de compartir sus informes delante de un público internacional. La pinatarense ha sido la única española ganadora.
De célula madre a neurona
Bajo el nombre 'Mecanismos moleculares alterados en la enfermedad de Alzhéimer y otras demencias' se enmarca la investigación financiada por la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (FISABIO) y realizada en el laboratorio del Instituto de Neurociencias de la Universidad Miguel Hernández de Elche. Un escenario donde Mariángeles Cortés ha transformado una serie de células madre &ndashprocedentes de un paciente con alzhéimer&ndash en neuronas para desarrollar una herramienta que permita «abrir una ventana» a los tratamientos personalizados y a la detección del alzhéimer con biomarcadores.
«Con la Covid-19, el resto de investigaciones han pasado a un segundo plano»
Financiación
Primero, explica, seleccionó una serie de células madre de un paciente con alzhéimer y las diferenció &ndash'transformar' en el argot científico&ndash en neuronas. Una vez que ya las tenía, después de unos tres o cuatro meses de trabajo y «muchas lágrimas», ha estado estudiando una proteína llamada acetilcolinesterasa de dos maneras. La primera dentro del estado normal de las células y la segunda después de 'infectarlas' con alzhéimer. «Todo esto se hace para comprobar si esas neuronas actúan de la misma forma que en lo hacen en una persona con alzhéimer y así tener un modelo celular de 'x' paciente sin tener que abrirle el cerebro», clarifica. De esta forma, puede ir haciendo comparaciones entre las reacciones sufridas por las células del laboratorio y un paciente. Con tales confirmaciones, «se puede estudiar cómo se está desarrollando el alzhéimer en esa persona en particular».
«La idea es conseguir un modelo celular de 'x' paciente sin tener que abrirle el cerebro»
Neuronas
Después de una serie de experimentos, ha podido verificar que efectivamente esas células siguen el mismo camino fisiológico que las que están dentro de una persona. «Cuando somos embriones tenemos pocas proteínas de este tipo pero al crecer aumentan en cantidad. El proceso se repite en las células que convertimos en neuronas». Un avance innovador que podrá exponer en Barcelona dentro de unos meses. Sin embargo, no todo ha sido un camino de rosas. Admite que ha sufrido y llorado mucho; también, ha tenido que viajar hasta Gotemburgo (Suecia) para aprender la técnica que sustenta la investigación de mano del Dr. Zettenberg y su equipo. Dicha técnica es la diferenciación que, como se ha explicado, sirve para transformar la célula madre a neurona. «Fui a Suecia porque tienen la técnica muy controlada y mucho dinero. Es una técnica muy cara y se necesita mucho tiempo», puntualiza y, de paso, da las gracias a sus directores de tesis (Dra. María Salud García Ayllón y el Dr. Javier Sáez Valero) por apoyarla.
Optimista en su justa medida
Cortés estudió Bioquímica en la UMU y entró por primera vez en un laboratorio con María Luisa Cayuela en 2016. Allí descubrió que quería dedicarse a investigar. Después estuvo trabajando en Oxford y en 2019 regresó a España. Ahora está finalizando su tesis doctoral sobre el alzhéimer. El hecho de que su abuelo tuviera una enfermedad neurogenerativa y le gustase ayudar a las personas la motivó a especializarse. «Descubrí que el alzhéimer afecta a muchísimas personas y que su mayor factor de riesgo es la edad. Todos nos hacemos mayores y tenemos riesgo de sufrirlo, así que me dije «vamos a empezar a investigarlo ahora para cuando me toque a mí, haber avanzado y no pasarlo tan mal». Sin embargo, es «optimista en la justa medida» porque todavía no se conoce el origen exacto de esta enfermedad. Tampoco ayuda que actualmente casi todo el dinero de investigación se destine a la Covid-19: «Todo lo demás ha pasado a un segundo plano».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión