La pareja murciana de 'La Isla de las Tentaciones' termina su aventura: ¿vuelven juntos a España?

El paso de Ana y Cristian por 'La Isla de las Tentaciones' ha sido todo un huracán de sentimientos. La pareja murciana fue la protagonista de la primera hoguera de emergencia de la historia del programa, después de que Ana estuviese a punto de abandonar la experiencia en plena noche al enterarse de que él le había sido infiel. En ese momento se dieron una última oportunidad, pero la pasada noche volvieron a verse las caras y tuvieron que enfrentarse a la gran pregunta del programa: ¿Quieren abandonar la isla juntos o solos?

La tensión entre Ana y Cristian se pudo notar desde que él llegó a reencontrarse con su novia y esta le negó darse dos besos: «No te los voy a dar porque no te lo mereces. No me creo nada de ti», comenzaba la murciana. Él, en su defensa, asumía que se había equivocado y se defendía: «Después de la hoguera no me he vuelto a besar con nadie. He estado cariñoso, pero he cortado el rollo». Sin embargo, Ana se mostraba dolida, porque creía que su novio podía haber actuado de otra forma para no hacerle daño.

La presentadora, Sandra Barneda, también jugó un papel clave al preguntarle a Cristian varias cuestiones que lo pusieron contra las cuerdas. «¿Si sabías que a Ana le molestaba, ¿por qué has seguido dejándote llevar con la tentadora?», quiso saber Barneda, a lo que el murciano argumentaba que tenía que ser sincero y llegar y no mirar a la chica a la cara no podía ser. También preguntó: «¿Crees que Ana es una exagerada?», algo que Cristian negó, aunque recalcó que después de la hoguera no se había «liado con nadie y eso ella no lo valora». Por último Sandra quiso saber si habría perdonado a Ana si hubiese cruzado los límites. Cristian contestó que sí, pero la murciana no le creyó.

Después de la tensa conversación entre ambos, Ana confesó sentirse muy decepcionada: «No he hecho nada de lo que tú has hecho. Solo quería que marcaras tus límites y no has hecho». Cristian por su parte le contestó que se sentía «como una mierda por haber besado a otra chica, pero después he echado el freno de una manera brutal». Finalmente llegó el momento de la decisión final. El murciano aseguró que quería irse con ella y seguir siendo su pareja, pero Ana tenía muy claro que su respuesta no era la misma: «Tengo que ser honesta ahora mismo y creo que lo mejor es irme sola». Además la chica consideró que se marchaba «reforzada» de la isla, porque «aquí me he dado cuenta de que iba primero él y después yo. He aprendido a ser mucho más fuerte de lo que yo me imaginaba».

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