Carmen Boza: «Quiero llegar a un sitio que me represente artísticamente»

Carmen Boza (Cádiz, 1984) se ha convertido en los últimos años en una de las voces con mayor repercusión a nivel nacional dentro de la canción de autor. Directa y amable, estará este jueves gracias a la Ruta Firestone en la Sala REM, que reanuda sus conciertos en directo tras el largo paréntesis de la pandemia.

–¿Cómo se encuentra con la vuelta a los escenarios?

–Muy bien, muy contenta. Muy ilusionada por poder hacer cositas con relativa normalidad o lo que se va pareciendo.

–¿Sabe qué medidas de seguridad seguirá el concierto?

–Creo que será de pie según tengo entendido a día de hoy. Lo que sabemos es que la gente va a ir con mascarilla pero va a poder estar de pie. O sea que el poder prescindir del elemento silla hace un cambio ya.

–¿Ha tenido que adaptar mucho su 'show' a estas condiciones?

–En realidad he tenido que adaptarme yo al subirme al escenario y encontrarme esa energía que es un poco distinta, bastante distinta, no solo porque el público esté sentado sino por el poso de sensaciones que ha dejado toda esta situación que hemos vivido. Pero yo particularmente no he tenido que adaptarme mucho porque el estilo de música que yo hago es más tranquilo, muy introspectivo, es de prestar atención a las letras y en el caso práctico no me afecta a la música y a la experiencia. Pero sí que como música, como quién se sube al escenario, de pronto hay que lidiar con ello y hacerte el cuerpo, por así decirlo. Además, la gente también está en esa situación, en ese estado mental.

–Este año ha publicado dos sencillos: 'Caramelo' y 'Suave'. ¿Cómo los han recibido sus fans?

–Los han recibido bastante bien. Estos temas, junto con 'La Grieta' (2020) están abriendo y marcando un cambio de sonido y de conceptos. Si bien mi último disco, 'La caja negra' (2018), es una apuesta por asumir ese rol de producción artística, de hacer los arreglos y de estar encima de todo desde qué instrumentos van a tocar, qué arreglos se van a hacer, que mezclas van a ser... estos temas –con ese papel mío de hacer mi propia música ya asentando– van un pasito más allá al probar otras sonoridades, otros estilos en la lírica e, incluso, otra temática nueva que explora y llega un poco más allá que mi álbum anterior. Pero sí, es verdad que el público lo ha acogido bastante bien a mi juicio. Para mí que alguien lo escuche ya es acogerlo bien pero si le llega y, sobre todo, puede encontrar algo de rascar en las canciones para mí es un éxito. Objetivamente han funcionado muy bien y la gente también ha entendido estos pasitos que estamos dando hacia un sonido nuevo y los ha acogido con muy buena energía y óptica.

–¿En qué está trabajando actualmente?

–Estoy en un proceso de lograr encajar el concepto que quiero plasmar en el siguiente álbum porque estoy apuntando hacia otros sitios, otras sonoridades, investigando un poco y es un trabajo que quiero hacer con mucho mimo, mucho tesón, mucha cabeza para llegar a un sitio que artísticamente me represente más allá de que sean canciones que puedan funcionar más o menos sino que quede plasmado mi búsqueda como artista, como compositora en ese álbum. No obstante, tengo muchas canciones que iremos liberando a lo largo de los próximos meses para ir poquito a poco haciendo, como con las miguitas de pan, un camino para que la gente no se encuentre de golpe con que hay mucho cambio.

–¿Cuál cree que es ese concepto si tuviese que describirlo?

–Es que no lo sé, por eso lo estoy buscando. Creo que te lo he intentado explicar. No sé cuál es el concepto pero creo yo que, bajo mi manera de verlo, un artista tiene que estar, no necesariamente cambiando constantemente por cambiar, pero sí tiene que estar buscando lo que le mueve, lo que te emociona y lo que te transmite cosas y yo estoy en esa búsqueda. No sé si serán canciones más de un estilo al que vengo haciendo, uno un poco distinto, si habrá más carga instrumental o vocal. Estoy explorando muchísimas cosas, otra instrumentación, despojarme un poco de la guitarra. El concepto siempre clave en todas mis composiciones es el elemento emocional por así decirlo ya sea porque es expresado en palabras o sonidos, y siempre voy a buscar eso. Eso es lo único que te puedo decir.

–¿Qué relación tiene con la ciudad de Murcia?

–Al margen de que cuando era jovencilla estuve viviendo en Alcantarilla un par de meses y fue una de mis primeras experiencias vitales. Lo que me une a Murcia son las veces que he tenido la suerte de visitarla por mis giras o presentando algún proyecto pero siempre que he ido la gente me quiere mucho y siento ese cariño muy fuerte. Siempre me da mucha alegría porque queda muy lejos –pero, ¿qué voy a decir yo que vivo en Cádiz y siempre está muy lejos de todo?–. La gente siempre responde muy bien y tiene muchas ganas.

–¿Cómo surgió la oportunidad de participar en la Ruta Firestone? ¿Qué le parece?

–Eso se lo tendrías que preguntar a ellos porque fueron los que me llamaron pero pertenece a un tipo de propuestas que surgen por parte de iniciativa privada, y marcas que quieren apoyar la música en directo y, de paso, se hacen su promo o lo que ellos decidan. Pero al final de cuentas, lo que generan es música en directo, posibilidades para que la gente pueda ir a ver los conciertos porque regalan las invitaciones [mediante sorteos]. En definitiva, generan estos espacios de difusión cultural que, en este caso concreto, están muy bien y más en la situación que estamos viviendo. Apoyan a las salas, apoyan a las bandas y le dan al público la posibilidad de disfrutar de un ratito en música en directo que ahora es algo que hace mucha falta.

–¿Unas últimas palabras?

–Que tengo ganas de comerme una marinerita y animo a todo el mundo que a venga.

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